El toque de atención de Setién funciona con Livaja



La pasada semana Marko Livaja se quedaba sin viajar a Sevilla en lo que Setién quiso dar un toque de atención. «Tiene que centrarse un poco», esgrimía el técnico. Parece que ha tenido efecto inmediato. El croata disputó ante el Athletic su mejor partido como amarillo.

No marca, se mete en numerosas guerras y hasta siempre crea el miedo en el aficionado ante una posible expulsión. Pero Marko Livaja es mucho más que eso. Y así lo ha demostrado ante el Athletic. Setién le dejó fuera ante el Betis pidiéndole que se centrara y el croata, centrado, ha demostrado ser un jugador muy con muchos registros en el ataque.

Participa en la jugada del primer gol y da el tercero. Pero además de eso, fue un continuo incordio para Yeray Álvarez y de los jugadores más activos en el ataque, pese a que casi estuvo más de falso nueve que de delantero referencia. Incluso con el lujo de taconazos, todos con criterio y una rabona que demostró que el croata estaba a gusto y disfrutando.


No marca desde la primera jornada y ha tenido casi al igual tanto luces como sombras en sus partidos, pero Setién le dio un toque de atención y Livaja ha respondido con creces en el campo. Un partido ante un equipo tan físico y potente como el Athletic requería la mejor versión del croata y la encontró. Sin ser especialmente brillante en sus acciones, la mayoría de lo que hizo fue con acierto y criterio, completando probablemente su mejor actuación desde que aterrizara en la isla.

Ahora el balón está sobre el tejado del propio Livaja. Si esta versión es la que ofrecerá a menudo a partir de ahora, dependerá del propio delantero croata. Si consigue regularidad en su juego y se mantiene centrado, el ‘9’ amarillo parece tener dueño más allá del dorsal que luzca en la camiseta.