Una «caraja» que se repite y lastra



La UD Las Palmas llegó tarde al partido en Mendizorroza y cuando se dio cuenta ya estaba por detrás en el marcador. Otra vez un mal inicio que pone todo cuesta arriba desde el inicio y obliga al conjunto de Setién a trabajar a contracorriente. La UD reaccionó y pudo llevarse la victoria, aunque no se puede considerar injusto el empate.

La historia se repite, y no será porque no se había avisado. El propio Setién antes del inicio del choque, en vestuarios, avisó claramente a sus jugadores: «A ver si no salimos con la caraja», a lo que añadió poco después: «Recordemos los partidos del Betis y el Athletic». Como quien escucha llover. A los cinco minutos la UD ya iba perdiendo y no había prácticamente salido de su área.

Lo sangrante es que es una historia que se repite una y otra vez. A esta UD le está costando entrar en los partidos. Ante el Athletic el pasado lunes tuvo 20 minutos donde fue superado, contra el Betis casi ni apareció en la primera parte, caso similar ante Osasuna, el desastre del Celta, el de Anoeta, el mal inicio en Mestalla… Demasiadas ocasiones en las que el equipo de Setién sale sin la concentración necesaria y cuando se quiere conectar ya va a remolque.


El equipo grancanario no está sacando buenos resultados fuera de casa, pero los puntos cosechados parecen no ir en consonancia con el nivel de juego mostrado. Salvo en el Villamarín y Anoeta, la UD ha merecido por juego en general mucho más de lo que ha logrado. Pero hay un punto negro que se repite y está privando de muchos puntos al equipo de Setién. La «caraja», esa de la que avisó el propio técnico cántabro pero ni así pudo evitar.

No obstante, el punto en Vitoria puede darse por bueno tras valorar el mal inicio y las importantes bajas con las que contaban los amarillos. Un punto que se haría mejor todavía si el próximo sábado se logran los tres ante el Leganés en Gran Canaria. Sería la mejor forma de afrontar con la máxima confianza el nuevo tramo que se abre justo después con las visitas al Vicente Calderón y Camp Nou. Pero, para eso, la UD debe encontrar la regularidad desde el inicio y no darse tantos tiros en el pie.