Setién: «Es increíble ver este equipo ahora y verlo hace dos meses»

Setién en una imagen del choque ante el Atlético. | Gabriel Jiménez (udlaspalmas.NET).


El técnico cántabro admitió la derrota sin paliativos sufrida ante el Atlético y analizó las causas, donde destaca especialmente que el estado de ánimo está haciendo mucho daño a la dinámica del equipo. No obstante, apeló a que en los momentos malos es cuando más se debe reforzar la idea.

Valoración del partido: «Los primeros minutos ellos han salido muy bien, muy fuertes, nos han apretado y nos han creado muchos problemas, más cuando casi en la primera jugada te hacen el primer gol. En una acción que la tengo que analizar con detenimiento, pero la realidad es que entran en combinación varios jugadores muy rápidos y no nos da tiempo a defender bien. Nos cuesta defender bien y esto supone un mazazo enorme como supuso el otro día el gol del Leganés. Sabíamos de las dificultades que íbamos a tener. Tratábamos de gestionar esos minutos iniciales, esperar que pudiéramos soltarnos un poco y hacer nuestro fútbol para poder desplegarnos lo suficiente para tener el balón y hacerles daño. Luego han llegado el segundo y tercero seguidos y ya hemos sufrido con contundencia un daño enorme que no nos ha permitido superarnos a nosotros mismos, hemos estado todo el partido a remolque».

Equipo decaído: «Es obvio que llevamos una racha que no estamos en nuestro mejor momento, en todo. Nuestro estado anímico, confianza con el balón se ha visto mermado, y luego en los momentos importantes como hoy en el minuto 2 te hacen un gol y supone un mazazo enorme en tu línea de flotación que difícilmente te recuperas. La realidad es que es increíble ver este equipo ahora y verlo hace dos meses o al comienzo de temporada. Es evidente que hay un cambio enorme que requiere una reflexión seria y profunda porque evidentemente no sé si es culpa mía, de las circunstancias… es difícil encontrar algo que podamos achacar concreto para entender lo que nos está pasando. Un cambio tan radical en este equipo cuando hace dos meses o siete meses era elogiado en todo el mundo y siguen siendo los mismos jugadores, entrenador, idea y convicciones. Pero realmente se está produciendo un final de temporada decepcionante en el que los resultados no nos están acompañando y tampoco las sensaciones. Evidentemente quedan tres partidos y no nos queda otra que seguir trabajando y tratar de salir de esta situación a ver si en Gijón podemos dar una imagen diferente y afrontar esta situación con hombría y cabeza alta».


Cuestión de estado de ánimo: «He vivido estas situaciones de jugador, en las que pierdes una serie de partidos y no es fácil salir de ella. La atraviesan casi todos los equipos. Afortunadamente para nosotros lo atravesamos con el objetivo cumplido, lo cual es un alivio porque si nos estuviéramos jugando la permanencia… Los jugadores son personas y aquí lo que está influyendo mucho es el estado de ánimo. Esta situación después de haber vivido una primera vuelta extraordinaria les ha cogido un poco descolocados. Hay cosas que seguramente nos están influyendo y nos están mermando muchísimo el rendimiento, pero todo viene desde el estado anímico. Yo seguiré defendiendo a los jugadores. Cuando alguien sale al campo lo hace con la mejor intención, con el estímulo de querer hacer las cosas bien porque los futbolistas se están jugando mucho. Nadie sale al campo a fallar un pase. Hay una parte importantísima en el estado de ánimo para llegar a entender las cosas. Los futbolistas están dando lo mejor que pueden en este momento dada la situación».

Malas sensaciones: «No soy de los que renuncio a mitad de camino ni me lamento demasiado de las cosas. Siempre tanto en lo bueno como en lo malo trato de mirar hacia adelante. El pasado nunca me dio nada, sino el trabajo diario. Me habéis visto cuando las cosas iban bien y todo el mundo orgulloso y yo estaba en la misma línea y la misma cautela. Son momentos difíciles sobre todo para nuestra afición porque está esperando un estímulo positivo que no recibe desde hace ya tiempo. Todos nos habíamos generado unas ilusiones enormes que no estamos cumpliendo. Quizá Las Palmas no era tan bueno antes y ni tan mala ahora. Yo seguiré en la misma línea porque no hemos cambiado nada en lo que hacíamos hace siete meses. Seguimos trabajando con el mismo compromiso, sólo que ahora el fútbol nos está dando la amargura de malos resultados y mala imagen. Esto ha sido siempre así y lo que tenemos de tratar es de cambiarlo y con la dignidad con la que hemos afrontado este partido y todo el año. Sé que hay mucha gente enfadada con lo que ha visto en el campo y es lo normal. Uno disfruta cuando las cosas van bien y el público tiene todo el derecho a enfadarse con lo que ha visto en el campo. La realidad es que esto seguramente ya se ha vivido aquí y ahora toca levantar la cabeza, mirar hacia adelante y seguir caminando, con el objetivo cumplido, que no deberíamos perderlo de vista».

Silbidos hacia el entrenador: «No creo que los futbolistas hoy al principio del partido hayan salido sin alma. Es cierto que todo el mundo en su cabeza piensa que va a ser un partido muy difícil, todos nos creamos unas expectativas enormes, salimos motivados, nos juntamos en el vestuario… Pero en la primera jugada del partido te hacen un gol y todo eso positivo que estás esperando se vuelve al revés y te empiezas a subir una montaña que no tienes posibilidades. Con respecto a que el público me haya silbado yo lo acepto con la tranquilidad y asumo que el público entienda que me he equivocado en los cambios. Jamás he pensado que acierto en todo o tengo una varita mágica. También me equivoco y es muy respetable que la gente piense lo contrario a lo que yo hago. He salido de los campos aplaudido y silbado y esto lo entiendo como una parte más de este mundo en el que vivimos. Con todo el respeto asumo esas críticas».

Sensaciones de la afición: «Me da pena que tu afición en ese momento de dificultad y que no nos salen las cosas bien abandone el campo o te exija más cuando se está viendo que nos está costando una barbaridad. Respetas todo, pero los clubes pasan por momentos difíciles y serían seguramente menos si recibes el respaldo y apoyo en estos momentos. Lo mismo yo que los jugadores. Durante todo el año han dado muestras de compromiso y trabajo. Me ha dado pena hoy algunos balones que ha perdido Tana. Es el futbolista casi que más corre de la liga. Lleva tres partidos seguidos en seis días y está con una molestia en el tobillo, entrenando. Y así todos. El compromiso que tienen es extraordinario. El problema es el estado anímico. No son futbolistas con una experiencia tan grande como para exigirles lo que podíamos exigir al rival que teníamos enfrente. Lo dije cuando íbamos muy bien. Son futbolistas que llevan 40-50 partidos en Primera. Es el segundo año en esta categoría, incluido yo. Tenemos una forma de hacer las cosas con la que todos estábamos entusiasmados y ahora es cierto que hay gente que quiere que cambiemos algo. Pero ni es esto tan grave como para plantearse defenestrar a unos jugadores o quizá a mí, porque seguimos siendo los mismos. Es entendible que haya momentos que no te salgan».

Variar el estilo: «Yo puedo cambiar a Alen por Momo, a Jesé por Mateo o a Javi Castellano por Roque, o a Hernán por Vicente. Nosotros tenemos una identidad y eso no se cambia de la noche a la mañana. Es imposible que este equipo cambiando la forma de jugar vaya a mejorar. Lo vimos en Leganés jugando un poco más en largo. Tenemos unas características que son las que son y la forma que tenemos de jugar es la que hemos elegido y nos va bien. Si a los primeros síntomas de derrota este club y este equipo cambia de idea jamás tendrá una identidad propia. Estos son los momentos donde hay que reforzar lo que estamos haciendo. Que no tengamos ahora la precisión es entendible, que no estemos con ese punto de lucidez o que estén más cansados. Hoy teníamos un equipo enfrente que estemos en nuestro mejor o peor momento siempre hemos competido. Es cierto que hoy no hemos dado la imagen. Lo importante de verdad es mantener las cosas cuando van mal. Lo que se ha establecido aquí debería estar por encima del entrenador si es lo que toda la isla quiere. Nos han valorado en todo el mundo cómo ha jugado este equipo y estos jugadores. ¿Porque llevemos una serie de partidos de no dar el nivel todo el mundo se ha olvidado de lo que hicimos en el Bernabéu? Yo veo las cosas con un poco más de perspectiva y no dejarme llevar por el resultado. Seguiremos trabajando. La forma de jugar es innegociable, es la que yo siento, la que me va bien y no vamos a cambiar. Ni vamos a pegar pelotazos ni a defender. Iremos a apretar al rival en su campo y seremos valientes como todo este tiempo».

La UD pierde hasta el orgullo (0-5)