Boateng y el vacío de un líder nato



La figura de Kevin-Prince Boateng no será fácil de reponer. Miguel Ángel Ramírez, presidente de la entidad, admitió que su salida no altera los planes, por lo que no se prevé contratar a nadie para su puesto. Así las cosas, el futuro de la Unión Deportiva se vislumbra distinto sin la referencia de su máximo goleador en la temporada pasada.

La sorprendente marcha de Prince Boateng a tres días del inicio de LaLiga, como todo hecho en el fútbol y en la vida, tendrá sus consecuencias. La más próxima es el debate en torno a la posible contratación de una pieza que cubra el vacío dejado por el ghanés. No obstante, Ramírez se encargó esta tarde en rueda de prensa de espantar la posibilidad. El máximo dirigente del equipo insular admitió que centrarán sus esfuerzos en sondear el mercado en busca de un centrocampista, pero la opinión pública está dividida.

El ya ex delantero de Las Palmas deja a la plantilla sin una opción para la punta del ataque y otra para la banda. Prince se desempeñó en ambas posiciones durante el curso anterior con Setién en el banquillo, si bien se erigió en máximo realizador entre sus compañeros con diez tantos cuando el técnico cántabro le dejó como referencia ofensiva. Con ello, la UD pierde potencia, olfato goleador y su gran capacidad de jugar de espaldas.


El factor ‘líder’. Boateng ha demostrado, fundamentalmente, dos aspectos en relación a la gestión de las emociones y el juego: facilidad de adaptación y talento para liderar. Nada más llegar y conocer a la plantilla asombró su nobleza y humildad. Miembros del vestuario afirmaron que se había aclimatado a una velocidad admirable. Poco tardó, además, en erigirse en uno de los pesos pesados, tanto dentro como fuera del campo.

El juego mediático. La llegada de Boateng fue el detonante de un proceso de ‘mediatización’ emprendido por el club. El futbolista ghanés fue portada de periódicos en todo el mundo cuando aterrizó en la isla y, con él, la Unión Deportiva. De parecido calibre fueron las incorporaciones de Jesé y Vitolo, algo que ha mantenido a Las Palmas y al archipiélago en primera fila del panorama futbolístico.

Pocos apostaban por el éxito en su paso por las filas grancanarias. Sus problemas extradeportivos en anteriores fases de su carrera parecían no augurar buenos presagios. Calló a los críticos más acérrimos y puso todo el empeño para dar un giro en su vida. Ahora, se marcha como uno de los estandartes del grupo humano y profesional. El transcurso de los acontecimientos discurrirá por separado para Las Palmas y Boateng.

El papel de Calleri y Araujo a partir de ahora. La llegada de Calleri está destinada a resolver los problemas de efectividad que adoleció el conjunto pío pío en la 2016-17. La creatividad se atascaba en zona de tres cuartos de campo y no conseguía las mejores soluciones para rentabilizar el buen juego en goles. Si algo ha cambiado en esta nueva singladura de los canarios con Márquez al mando es el enfoque de una filosofía ya implantada. La convicción de ser más directos es la premisa fundamental.

Por su parte, Sergio Araujo regresa tras su aventura en Grecia. Pese a sus problemas físicos en pretemporada, el argentino no desistirá en la pugna y buscará ganarle la partida a su compatriota. Pero el técnico se guarda un as en la manga que ya dejó ver en el Trofeo Carranza: colocarle en banda.

Esto supondría la explotación de su facultad para asociarse sin la presión de ser el estilete del equipo. Mientras, la visita a Mestalla está a la vuelta de la esquina. Con ella dará el pistoletazo de salida un proyecto que genera ilusión y dudas en distintas proporciones.

También te puede interesar…

#DECLARACIONES | Ramírez señaló que no podía dejar solo a Prince