El conjunto amarillo está trabajando a destajo y sin descanso con el delantero nigeriano con el fin de ayudarle lo máximo posible en su carrera por destacar en la UD Las Palmas. El objetivo del cuerpo técnico que dirige Paco Jémez es tenerle en óptimas condiciones lo antes posible.
Emmanuel Emenike curra a contrarreloj. El delantero africano llegó en los últimos instantes del mercado invernal y la UD necesita sus servicios. El conjunto amarillo le trajo para que ayudase a Jonathan Calleri y le diese la posibilidad a Paco Jémez de tener una pieza en el banquillo que no tenía desde la salida de Loïc Rèmy. Aun así, el cuerpo técnico grancanario va a tener que trabajar a destajo con el internacional nigeriano.
De ese modo, tal como informa La Provincia, Las Palmas ha activado un plan especial para que Emenike pueda recuperar su forma óptima en el menor tiempo posible. El problema radica en que el ariete aterrizó en el universo amarillo pasado de peso y eso le privó de estar en la convocatoria del pasado lunes para el partido que enfrentaba a los grancanarios con el Málaga, abriéndole la puerta de nuevo a Erik Expósito.
Lo cierto es que desde el club se estima que el jugador del Olympiakos cedido en la UD tiene que perder entre cuatro y cinco kilos para estar en su peso ideal, una cuestión que le alejaría de nuevo de la convocatoria para el choque en San Mamés ante el Athletic. El delantero tendrá que apurar al máximo sabiendo que lo normal es que vuelva a quedarse fuera, atrasando así su debut al partido ante el Sevilla del sábado 17 de febrero.
Está claro que Las Palmas necesita de la presencia del killer nigeriano y el propio futbolista necesita recuperarse para no dar otro paso atrás en su carrera. El tiempo es oro y a la UD no le sobra ahora mismo, aunque para ello ya están trabajando al máximo. El plan de Emenike está activo y el Sevilla de Roque Mesa podría ser el rival ante el que consume su bautismo amarillo en la isla. Tocará estar pendiente de la báscula.
