La nueva vida de Jonathan Viera

Foto: Gabriel Jiménez (udlaspalmas.NET)


El ya ex jugador amarillo pondrá rumbo a China para embarcarse en una aventura sin parangón. La cultura del fútbol es distinta a la europea, pero también lo son el clima, la comida o el estilo de vida.

Jonathan Viera ya se ha despedido de su entorno, su isla y su país. El de La Feria dice adiós al buen tiempo, las papas arrugadas y la Playa de Las Canteras para decir hola al frío, el arroz y la Gran Muralla. Es un paso arriesgado pero cada vez más atractivo para los jugadores europeos, que ya van viendo con mejores ojos la exótica posibilidad de firmar un gran contrato en las ligas asiáticas.

La idiosincrasia de una nación en aras de occidentalizarse facilita la integración a los jugadores extranjeros que buscan jugar y competir en la Superliga china. El principal motor económico del continente ha puesto sobre el tablero nuevas cartas para convertirse en referencia deportiva a nivel mundial. Será un proceso costoso, eso sí, pero desde el gobierno ya ponen en marcha medidas para intentarlo.


“Se han empezado a establecer campeonatos a nivel nacional para categorías inferiores”, cuenta Dani Deudermont, especialista en fútbol asiático y director de la web Fútbol desde Asia. Y es que en China, según cuenta, el fútbol es un acontecimiento social que comienza a crecer, sobre todo, a partir de la temporada 2010-2011.

El detonante de la política de mercado china tuvo raíz en la compra de Guangzhou por parte de la empresa inmobiliaria Evergrande. El club de la provincia de Guangdong se hizo con los servicios de futbolistas como Jackson Martínez y Paulinho, dando el pistoletazo de salida al desenfreno económico. Sin embargo, el gobierno ha querido legislar para promocionar el producto nacional.

El fútbol, asignatura obligatoria

“La política del gobierno chino es desarrollar a toda costa el deporte local y que el fútbol sea un elemento principal. Por ejemplo, el propio fútbol es ya una asignatura obligatoria en muchos colegios”, comenta Deudermont. Además, la última medida impuesta para controlar el flujo de extranjeros obliga a tener un número equilibrado de jugadores sub 23 de la casa.

El próximo equipo de Jonathan Viera tiene un total de 4 futbolistas de fuera de las fronteras asiáticas en sus filas: Jonathan Soriano, Renato Augusto, Cédric Bakambu y ahora el mediocampista grancanario. Pero no todos podrán coincidir. Según la ley que entró en vigor el pasado mes de enero, solo tres jugadores extranjeros pueden ser alineados en el mismo once

La otra condición es que debe haber un mínimo de tres futbolistas sub 23 locales. Estas restricciones están destinadas a poner fin a las cantidades desmedidas que estaban dispuestos a pagar los grandes grupos empresariales chinos, pero, sobre todo, a promocionar la marca nacional.

Una ciudad europeizada

El estilo de vida que llevará Viera en China no distará tanto de lo que podría hacer en cualquier gran urbe europea. Pekín tiene 55 veces más población que Las Palmas de Gran Canaria, pero las pautas de comportamiento en un mundo globalizado acercan cada vez más a los ciudadanos de uno y otro lugar.

“Pekín está provisto de todos los servicios a los que estamos acostumbrados en España. Las multinacionales proliferan, hay unos cuantos Carrefour, así como otras cadenas chinas de supermercados donde se pueden comprar alimentos de España y de otros países de Europa”, cuenta Daniel Vinuesa, funcionario en la embajada de España en China.

La inmensa variedad cultural, gastronómica y, en general, en términos de tradición, hace que el país asiático sea aún más atractivo. Sin perder su esencia, Pekín ha conseguido transformarse progresivamente hasta llegar a ofrecer unos estándares de vida parecidos a los de ciudades del viejo continente. Lo que más puede afectar Jonathan Viera, no obstante, puede ser el clima.

“Quizá de lo poco malo de esta ciudad es su clima. Aquí desde principios de noviembre a finales de febrero hace bastante frío y es muy común que las temperaturas estén por debajo de cero grados durante gran parte del día”, admite Vinuesa. Y es que el futbolista isleño ya ha vivido en lugares como Bélgica durante su estancia en el Standard, pero las condiciones ahora serán distintas.

La pugna del fútbol por ser el deporte rey

El fútbol ya ha conseguido reinar en la contienda por ser el deporte más seguido en gran parte de Europa. Sin embargo, su máximo caballo de batalla ha sido, es y será, por lo menos en el corto plazo, Asia: “El fútbol emerge poco a poco, pero cuando paso por algún colegio o parque noto que no es un deporte al que jueguen los niños”.

El reto de Jonathan Viera es mayúsculo en tanto en cuanto afronta un cúmulo de dificultades que tendrá que ir superando. Tiene tiempo para adaptarse y talento de sobra para meterse al público en el bolsillo. La cultura del fútbol no está tan extendida allí como tal vez le gustaría, pero si alguien tiene la pócima para enamorar es el chico de La Feria. Ese que va a dejar las papas arrugadas por el arroz.