El centrocampista amarillo fue el encargado de asumir la responsabilidad de lanzar una pena máxima decisiva y no se puso nervioso a pesar del momento de tensión. El de Siete Palmas se vistió de héroe y el filial sonrió.
Las Palmas Atlético caía y Edu Espiau se dispuso a internarse en el área. El delantero amarillo forcejea con el defensa y cae al suelo, consiguiendo que el árbitro señalase el punto de penalti. La alegría se trasladó rápidamente a las gradas del Anexo de Gran Canaria dada la importancia de ese gol con un marcador en contra.
El encargado de lanzar la pena máxima fue Pablo Santana. El centrocampista se responsabilizó y decidió asumir el riesgo. Sin haber tirado un penalti en su vida, el ‘7’ respiró antes de lanzar y remató para empatar el partido, aunque sin saberlo iba a darle al filial amarillo un gol que bien va a valer una permanencia en Segunda División B.
Vea aquí el VÍDEO:
Aquí está el Gol de @PabloSantana94 para empatar el partido ante el Ejido, 1-1. Un gol que vale una permanencia!! 💪🏼💛💙 pic.twitter.com/EqcPpBjSm8
— La Cantera Amarilla (@canteramarilla) 13 de mayo de 2018
