Mañana 7 de julio arrancará el nuevo proyecto de la UD Las Palmas con Jiménez que buscará estar en la primera línea de batalla por el ascenso. A poco más de un mes para que comience el fuego real, los amarillos empiezan a sudar para terminar de despejar los fantasmas que les persiguen desde el verano pasado.
San Fermín en El Hornillo en pleno arranque de una nueva era. Después de un año para no recordar y tras muchos vaivenes, la UD Las Palmas pone la primera piedra de lo que espera que sea su camino de regreso a Primera. Manolo Jiménez aterriza en la isla con mucho trabajo por hacer, con un reto ilusionante por delante y Telde va a ser el escenario de su ‘Chupinazo’ particular para empezar a hacer funcionar el engranaje amarillo.
Lo cierto es que este inicio será atípico por el hecho de que algunos de los hombres que pisen el césped mañana puede que no formen parte de este proyecto. La directiva tiene que resolver cuestiones en cuanto a aquellos jugadores que no quieren continuar o que tienen ofertas para jugar en LaLiga. Al mismo tiempo, deben hacer hueco a aquellos que sí podrían aterrizar en las próximas semanas como es el caso de Rubén Castro.
No obstante, el bautismo del sevillano es un acontecimiento que no se puede atrasar más y tendrá que resolver poco a poco el puzle de lo que será la plantilla definitiva. Con el paso de las semanas y del mercado, la UD irá ajustando piezas y buscando lo que necesita para intentar llegar al primer día de competición con un aspecto más reconocible, algo que suele ser bastante habitual en los veranos de todos los equipos en la actualidad.
Dentro de ese proceso de construcción podrían estar algunos jugadores que pondrán sabor de cantera a esta preparación. Hasta 9 futbolistas del filial intentarán dejarse ver durante el próximo mes para convencer a Manolo Jiménez. El preparador de Arahal señaló en su presentación que no iba a cerrarle puertas a los chicos que llegaban desde abajo, por lo que, si cumple con ello, los cachorros amarillos podrían hacerse un hueco.
También será el primer día, o el primer día de una nueva etapa, de los fichajes que ha acometido Las Palmas en este tiempo. Los Álvaro Lemos, Fidel o Mantovani se estrenarán como jugadores insulares y acompañarán a su entrenar con esos primeros momentos de una nueva aventura. Mientras tanto, Deivid Rodríguez y Nauzet Pérez van a comenzar a ejercitarse de amarillo pero con cierto tono de déjà vu.
Con todo eso, el arranque de la pretemporada es un soplo de ilusión necesario para una entidad que lleva sumida en las tinieblas demasiado tiempo. La UD pelea por salir del infierno y desde los despachos se está intentando construir una nave lo suficientemente potente como para volver a la tierra prometida, por lo que este comienzo debe estar forjado con una receta con la que poder recuperar la esperanza perdida meses atrás.
Aunque el camino que empiezan los grancanarios mañana es bastante largo, no les queda otra que comenzar a andar para poder dejar de lado un pasado para olvidar.
Este artículo se modificó el 08/07/2018 09:49 09:49