Todo o Tana

Foto: UD Las Palmas


El mediapunta de San Cristóbal debe dar una respuesta a la insistencia de la UD para mantenerle en nómina y así zanjar la incertidumbre sobre su futuro. El club le quiere, el entrenador también y la afición amarilla sabe cuál es su potencial. 

Figura siempre en el ojo del huracán. Hombre de calidad contrastada y de fútbol de salón. Pedro Tanausú Domínguez Placeres es un violinista que le vendría como anillo al dedo a la UD Las Palmas que está montando Manolo Jiménez y, después de que tanto el técnico como el club hayan movido ficha, es el turno del mediapunta de tomar la decisión definitiva que deja a un lado todas las dudas que existen a día de hoy sobre su futuro.

Lo cierto es que la pretemporada está alcanzado un punto donde no sería beneficioso para ninguna de las partes alarga la situación si Tana no quiere seguir. Como ya ocurriese con Simón, que finalmente rescindió contrato y se marchó al Dépor, el canterano tiene que dejarle claro a la entidad lo que le pide el cuerpo para que, por un lado, pueda resolver su situación contractual y, por otro, se le pueda encontrar un recambio en el mercado.


Aun así, el ’24’ se mantiene al margen de todo esto y sigue brillando con luz propia en los amistosos de la UD en este verano. Siendo una de las pocas piezas que pueden ofrecer algo distinto en el centro del campo dentro de los problemas de los insulares para generar ocasiones, el mediapunta ha sido uno de los nombres propios de estos 22 días de preparación y le ha dado motivos a Manolo Jiménez para quererle en la plantilla final.

«Disfruto con el buen fútbol y Tana… Es como el buen vino: lo tienes que degustar», señaló el entrenador sevillano tras la disputa de la Copa Mahou al ser preguntado por el centrocampista, pero desde entonces su situación se ha mantenido en el mismo punto. El jugador marchó a Inglaterra junto al resto de la expedición y ahora que termina el stage puede ser un buen momento para que dé un paso al frente con el que despeje las dudas.

Evidentemente, todos saben qué tipo de jugador puede ser el de San Cristóbal y la capacidad de Jiménez para recuperar a futbolistas que no terminan de encontrarse, como ya ocurriese con Araujo, puede ser un punto de inflexión en su carrera. El del Arahal está dispuesto a conseguirlo, pero ahora tiene que ser el canterano el que le dé la mano a su nuevo mentor o tome un camino distinto con el que volver a empezar.