El empresario Sebastián Grisaleña Sánchez tiene desde hace dos días una calle a su nombre, situada en el polígono industrial del Goro. En el acto estuvo acompañado por amigos, su familia, empresarios locales y antiguos futbolistas amarillos en representación de la Asociación de Exjugadores UD Las Palmas.
Grisaleña, tuvo un pasado como futbolista marcado por su estancia en equipos insulares. Desarrolló toda su etapa de formación en las categorías inferiores de Las Palmas hasta llegar al primer equipo. Más tarde ficharía por el Club Deportivo Tenerife, aunque su estancia en la isla vecina fue testimonial, pues tan solo un año después firmaría por el Marítimo de Funchal. Allí estuvo durante más de un lustro, hasta que regresó a Gran Canaria para formar su propia empresa.
El empresario se mostró agradecido por la condecoración recibida de su «ciudad de adopción», Telde. La calle que lleva su nombre, tiene una longitud de 430 metros y está situada en el ensanche del polígono industrial del Goro.
El presidente de la Asociación de Exjugadores UD Las Palmas Roque Díaz, el tesorero Félix Noda, Paco Castellano, Manuel Martín, Álvaro Pérez y el presidente de honor del club amarillo, Germán Devóra, acompañaron a Grisaleña en un momento tan especial.