El conjunto dirigido por Paco Herrera mostró una versión más valiente en cuanto al nivel ofensivo, pero naufragó gracias a errores infantiles en su propio campo que acabaron convertidos en cuatro goles por segunda visita consecutiva.
No hay paz para esta UD. Los amarillos vuelven a ser goleados en una locura de choque en el que, por lo menos, se vio una versión mejorada ofensivamente hablando. Sin embargo, eso no fue suficiente para poder llevarse el choque debido a los constantes errores defensivos que acumuló, dejando que jugadores como Lazo, Escriche o el ex canterano Cristian Herrera campasen a sus anchas.
Lo cierto es que los goles de Cala y Maikel Mesa dieron oxígeno y algo de fe. De hecho, en una mala entrega de la zaga lucense Rubén Castro encontró a Sergio Araujo y el killer argentino, que se plantó solo ante Juan Carlos, mandó el balón al palo en lo que habría sido el empate a tres. No obstante, esa pelota no entró y ya en el descuento Iriome aprovechó la pasividad defensiva insular para hacer un golazo.
