La mejor versión de Timor tiene que llegar ya

Foto: Twitter (@timor_sv)


Timor llegó a la UD Las Palmas como uno de los jugadores llamados a ser referentes de la que parecía una de las mejores plantillas confeccionadas de la categoría. Sin embargo, tras rendir a un buen nivel en el inicio liguero, el centrocampista ha bajado su rendimiento considerablemente. 

El futbolista valenciano apostó fuerte por la UD, marchándose de un Girona en el que había sido titular en los dos primeros partidos de LaLiga Santander. El proyecto de ascenso de los amarillos y la posibilidad de tener un buen contrato en la isla, despertaron el interés de un futbolista contrastado, que había rendido al más alto nivel en las últimas campañas y del que se esperaba que fuese uno de los baluartes en el largo camino del conjunto insular para retornar a la Primera División del fútbol español.

Timor ha demostrado de lo que es capaz y de lo que puede aportar el equipo, pero no logra mantener una regularidad que le aporte una estabilidad tanto con balón como sin él a los grancanarios. No obstante, la presencia de Gaby Peñalba en este último tramo de competición ha hecho que el valenciano se viese más liberado y se hayan podido ver algunos detalles del todocampista que vino a la UD para comandar al equipo de Manolo Jiménez, ahora de Paco Herrera.


El «12» amarillo cuenta con un 80% de acierto en sus pases, ha dado una asistencia y 15 pases claves en lo que llevamos de temporada. En tareas defensivas, ha ganado el 46% de los duelos individuales y el 67% de los duelos aéreos. Sus estadísticas no son malas, pero no llega a conseguir que esos números se transformen en buenas sensaciones en la mayoría de los partidos, en los que todavía no se ha visto a un Timor resolutivo en ataque, expeditivo en defensa y con un buen criterio en la toma de decisiones.

Todas estas características, las ha mostrado en algún momento de la temporada, pero sin llegar a mantener una regularidad que resulta trascendental para poder luchar por alcanzar los puestos de arriba. Después de dos meses de competición donde su rendimiento cayó en picado, parece que poco a poco vuelve a ser importante.