Llegados al ecuador del calendario liguero, con las ilusiones no tan intactas, conviene repasar algunas claves necesarias para alcanzar el sueño, para cruzar a la otra orilla. Como los concursantes que superan la ruleta de la fortuna proponemos un diccionario que nos da las claves de la segunda parte del campeonato, para no olvidar y poner atención si queremos el premio final. Aquí va el Diccionario del ascenso
A de Ambición, primero para buscar el Ascenso directo, no la sexta plaza, después para pelear cada punto, cada balón dividido, el triunfo estará en los detalles, en la entrega.
Benito, que cuando está nos da soluciones, marca goles y refuerza el equipo cuando falta la energía. Con la derecha y con la izquierda nos puede ayudar.
Canarias, nuestra tierra, la sede de nuestro estadio que debe ser un fortín. Nos esperan visitas como las del Almería, Girona, Leganés y Huesca. Y C de corner, la asignatura pendiente de un equipo que no mete ni miedo desde la esquina. Un problema de años.
Dianas. Nos han faltado muchas en la primera vuelta, muchos tiros, muchas oportunidades y pocas dianas para los méritos realizados. Hay que transformar las ocasiones. Dieciocho tiros con el Eibar, cero goles.
Espíritu de victoria. Acostumbrarnos a ganar, a vivir con la victoria como algo familiar.
Buscarla en cada disputa, en cada partido, en cada pugna. Ser competitivos. Fe en el triunfo.
Fuera. La tierra lejana que se nos niega para la victoria. Otro mal de años, que hace que nos cueste sangre sudor y lagrimas ganar fuera de Canarias. Sin victorias a domicilio el ascenso se complica. Y debemos evitar la F de fallos en defensa, menos que el año pasado, pero ya hemos dado algún regalito, como en Lezama en el minuto uno. Un virus que debe desaparecer.
Goles que se meten y goles que no se encajan, pero es quizá lo que más nos cuesta, después de esta primera vuelta, con muchas ocasiones y pocos goles. Necesitamos eficacia, somos el equipo que más necesita tirar a puerta para traducir en goles. Que Mujica, Peñaranda, Jesé, Viera… sumen de dos en dos. Y el equipo de tres en tres.
Huerto, cantera, semilla… nuevos valores que lleguen al primer equipo como Moleiro, como en su día Pedri. La riqueza de un equipo con frescura, savia nueva y el valor de los grandes equipos. Nuestro tesoro que debemos cuidar y ensalzar. Bendita cantera.
Invierno, Un mercado que puede marcar diferencias, una oportunidad para que Pepe Mel termine de dar pinceladas a una gran plantilla, defensa, centro, delantera, todas las armas son pocas, si el objetivo es el ascenso. Un cerebro en el centro del campo.
Jesé. Un jugador clave, que si además ve gol, nos subirá en lo más alto de la tabla.
Kirian. Otro jugador clave, que es termómetro del equipo, como Pejiño, si él esta bien, es que el vestuario va bien, le necesitamos al 100 % , tiene mucho fútbol en sus botas.
L de Levantar y de luchar, remontar resultados, reponerse del golpe y no quedarse en la lona. Habrá momentos de derrota, y lo importante es levantarse, y no dejar de luchar. La L de lesiones, que ojalá nos respeten. Y el covid, otro amenaza.
Mel estabilidad en el banquillo, una idea de juego y una experiencia que vale oro, ya lo hemos dicho él sabe el camino, si le dejamos apoyado con fe, recursos y entusiasmo lo puede hacer. Él nos debe hacer creer, y nosotros creer en él.
Números. Son los que te dan el ascenso, y deben ser buenos y rotundos. Número de goles, número de victorias, de subir y números de pocas derrotas. Portería a cero, goal average. El ascenso también es una lucha con los números.
Organización, cuando estamos ordenados, las cosas funcionan, jugamos de memoria, y el futbol fluye, da igual quien juegue, el orden se impone, y el mecanismo de un equipo que juega de memoria puede ser demoledor.
Proponer, ofrecer un juego nuestro, vistoso, con identidad, que no se pliega al rival, si no que tiene personalidad, eficacia y una identidad en la que se cree. Lo hemos mostrado, pero en la recta final ya no hay espacio para la dudas, hay que creer.
Querer más. No basta con un gol, no basta con empatar fuera, necesitamos ese plus que hace a los equipos grandes, si somos rácanos con el gol y las victorias o firmamos empates, mal nos irá.
Regularidad, Es la clave del torneo, no podemos jugar bien un fin de semana y mal el otro, tenemos que tener una fiabilidad, una contundencia y una eficacia que se mantenga en los partidos que restan. No perder la identidad.
Sufrir. Debemos saber sufrir, manejar los partidos adaptarnos a situaciones difíciles y mantener el tipo cuando el rival nos acosa, los árbitros nos impacientan, las lesiones nos afectan, y las circunstancias nos complican el partido. Ganar sufriendo también es ganar.
Tarjetas. Otra clave para mantener nuestras fuerzas, evitar expulsiones, sanciones y mermas en las alineaciones. Las tarjetas acompañan a los que van debajo de la tabla, y suplen su fútbol y falta de temple con malas artes y muchos nervios.
Unidad, en la plantilla, equipo técnico y afición. Juntos somos más y pensamos mejor. Ya han demostrado que el vestuario es como una familia, y eso debe seguir así, sin fisuras, todos unidos, los que juegan y los que no.
Viera. El cerebro, la estrella, con la V de victoria, su visión de juego nos debe llevar a lo alto de la tabla. En la V no entra el Var, que suele ser fuente de excusas y distracción. Si cabe la V de venganza, de partidos que han dolido como las derrotas con Málaga, Zaragoza, Eibar y Leganés que deben ser victorias en la segunda vuelta.
Contiene la W de Show. De espectáculo, de buen juego, de brillantez, de técnica, vistosidad, esa que despierta admiración, contagia afición y llena estadios, y es un sello del futbol canario. No basta con ganar.
X de empates que hay que poner en valor en la segunda vuelta. Con victorias con rivales como Valladolid y Almería, Girona o el Oviedo, Si sacamos tres puntos y goal average a estos rivales directos habremos ganado bastante. Victorias que valen doble.
Ya toca. Y no debemos posponer más esta tarea del ascenso. Cuantas menos cosas dejemos al azar, mejor. Decisión, previsión y eficiencia. Aspirar a la sexta plaza es arriesgado.
Z de corazón, que es ese plus que se pone en el campo cuando se sienten los colores, otros lo llaman coraje, entusiasmo , entrega, algo que marca la diferencia, y los jugadores nacidos en Canarias saben lo que es plus de entusiasmo, ese golpe de corazón. Si sentimos la camiseta, supone compromiso, identidad, orgullo y entrega. Y eso siempre tiene recompensa. No sin sacrificio. Toca sufrir. Feliz 2022.
por Javier Fernández de Angulo
Editor de la revista Gentleman en México
Ex director de GQ, y subdirector de ELLE y VOGUE en España