El jugador tinerfeño, que sigue luchando contra un linfoma de Hodgkin, va por el buen camino y ya está haciendo algo de deporte e incluso nota el bazo menos inflamado. Este jueves, tercera sesión de quimioterapia.
Kirian Rodríguez no pierde la sonrisa nunca y lo demuestra cada día en las instalaciones de Barranco Seco, donde trabaja día a día con una mentalidad positiva y un agradecimiento eterno: «Mi sueño es volver a jugar. El calor que me está transmitiendo la grada sería precioso saltar al campo y sentirlo desde el césped», comentó en Mírame TV.
«Ya me han dado dos sesiones de quimio y me toca la tercera este jueves», reconoce Kirian Rodríguez, que actualmente «está más tranquilo, el cuerpo está respondiendo bien. Ya voy notando muchas cosas como que el bazo está menos inflamado. Ya puedo hacer algo de deporte y sentir esas agujetas en el cuerpo y por lo menos sentirte capacitado para hacer algo».
En su día a día, reconoce que «hago un poco de trabajo de fuerza de manera individual» para combatir de la mejor manera el linfoma de Hodgkin: «La última semana de quimio la tengo la semana del 17 de noviembre», explicó el tinerfeño, que también reconoce que en su día a día hay «total naturalidad con los compañeros. Ven que bromeo, que para todo es una sonrisa … que si le puedo sacar una broma y es humor negro. Cuanto más normal lo llevemos mejor».
Entre todos, destaca Benito Ramírez, una relación que nació en la cadena de filiales y que se forjó cuando fueron compañeros de piso: «Tengo una relación más que especial. De Tonono llamarnos y decirnos: uno está buscando piso y el otro también. Pónganse de acuerdo porque no tienen casa amarilla. Los dos nos vimos en esa situación hasta que encontramos un piso y convivimos un año juntos», explicó en Mírame TV.
Con esa eterna sonrisa, manda un mensaje muy claro de cómo es él: «Hundirme … en mi vida no he estado hundido nunca, no es una opción. Sabía que iba a salir adelante. La gente que tengo a mi alrededor me van ayudar en lo que haga falta y me conozco, soy cabezón. Lo voy a intentar de la manera que sea», explicó el tinerfeño, que para las sesiones siempre va acompañado de su «pareja. Siempre suele estar conmigo en las sesiones. Son tres horas y media. A veces vemos una película, una serie o duermo. Tienes tiempo de sobra».
Cuestionado por si esperaba este cariño, reconoce que «quizás no esperaba tanto cariño, pensé que iba a ser más natural, que no iba a tener tanta repercusión como tuvo. Que la gente me iba a dar ese cariño pero que con el paso del tiempo lo iba a ir tomando como algo momentáneo, pero no lo que ha demostrado la afición, el club y la gente. No sabes como va a reaccionar la gente».
Entre esas reacciones, desveló que «el Real Madrid me mandó una carta que Emilio Butrageño se puso en contacto conmigo, casi todos los capitanes de Segunda se han puesto en contacto conmigo para mostrar su apoyo y del equipo …». El apoyo no le va a faltar a Kirian Rodríguez, que en el momento que vuelva a pisar el césped del Gran Canaria se llevará la mayor ovación en la historia de Siete Palmas.
