Las Palmas, tras una primera parte desastrosa, logra darle la vuelta al partido en una segunda mitad donde jugó con un jugador más. Un golazo de Sandro y una gran definición de la UD permiten a los de Pimienta dormir líderes de nuevo.
García Pimienta decidió castigar a Sergi Cardona con el banquillo tras el error cometido ante el Racing de Santander –penalti sin fijarse en su marca–. Su reemplazo fue Enrique Clemente, el peor de los amarillos en la primera mitad. Muy limitado en labores defensivas. Viera volvió al once –todavía está lejos de su mejor nivel– y Sandro ocupó la titularidad en la pelea del ‘9’. Eric Curbelo y Coco volvieron a formar pareja titular.
Los primeros quince minutos de la UD Las Palmas en Can Misses fueron enormemente preocupantes. Superados en todo momento por el colista, con varios puntos de intensidad por debajo y sin poder tener continuidad con la pelota. En el minuto 7 un exceso de confianza de Coco propició un resbalón que dejó a Bogusz solo delantero de Álex Domínguez. Por suerte, el guardameta amarillo tapó a las mil maravillas. No sería el único error de bulto de los grancanarios.
El Ibiza de Alcaraz –a estas alturas, no sorprende– se armaba por dentro, tratando de salir con balón largo principalmente a Ekain. El Ibiza ganó un % altísimo de esas jugadas, dando continuidad y poniendo en aprietos a los de García Pimienta. El técnico catalán ya avisó que esto no era un partido trampa, era un partido muy difícil. Y no se equivocó.
En el minuto 21 llegaría otro de esos errores para olvidar. Álex Domínguez no salió con decisión a un centro fácil desde el costado, dándole en bandeja a Bogusz el 1-0. La UD, cariacontecida, sonrojada por un nivel tan bajo, trató de volver a su método: balón, tranquilidad y buscar a Alberto Moleiro, el mejor de los visitantes.
Mientras tanto la UD seguía sufriendo, principalmente en el flanco de Enrique Clemente, tembloroso, desacertado y desbordado. No tiene el nivel para ser jugador de un equipo que aspire a cosas altas en la categoría. García Pimienta castigó a Sergi Cardona, y con ello propició dos problemas: el propio de no tener a un lateral ofensivo que da amplitud al equipo, y el miedo constante de tener a Enrique Clemente. Una mala decisión.
La UD, con disparos lejanos de Pejiño y Viera trató de inquietar la portería de Fuzato, que no tuvo que hacer ninguna parada de mérito. Los de Alcaraz, fuertes en cada acción, imposibilitaban a la UD tener comodidad más allá del medio del campo. Quedaba una segunda parte por descifrar, después de unos 45 minutos lamentables en la casa del colista.
Cambio de guión radical y remontada
Comenzó la UD sabiendo que no lo podía hacer peor. Desde esa perspectiva, sólo quedaba mejorar. Sandro en el minuto 47 tras un pase magistral de Alberto Moleiro perdonó una ocasión clarísima, que se encontró con una buena reacción de Fuzato.
El partido cambió en el minuto 50. Un giro de guión radical. Pejiño se adelantó a Escobar, amonestado en la primera mitad, quien impactó con el brazo en el cuello. Segunda amarilla. La UD jugaría toda la segunda mitad con un jugador más. No sólo eso, pronto cambiaría el marcador a su favor.
Sandro Ramírez, esta vez sí, encontró premio a su disparo. Desde la esquina del área buscó el palo largo y esta vez sí lo encontró. Un golazo para el delantero grancanario que necesitaba el equipo, y él a nivel individual (min. 50).
La UD estaba en el campo, obviamente, de manera distinta. Teniendo la posesión, con tranquilidad y tratando de ser verticales ante un Ibiza más en el bloque bajo. Un error de la defensa del Ibiza culminaría con Viera en una posición inmejorable. Se quedó solo ante Fuzato y definió por bajo de manera sensacional (min. 62). Las Palmas se ponía por delante en un abrir y cerrar de ojos.
El Ibiza no estaba muerto. Ekain de espaldas y luego Pape Diop a la salida de un córner pudieron poner el empate en el marcador. El espíritu de la pasada semana con el Racing de Santander revoloteaba en el pensamiento de todos. Había que cerrar el encuentro.
Las Palmas sufrió, principalmente en los últimos minutos desde los saques de esquina, pero terminó llevándose los tres puntos. La UD duerme líder y ya tiene 42 puntos en su casillero. Ahora, dos partidos seguidos en casa. Hay que mejorar en el Estadio de Gran Canaria. Toca seguir haciendo autocrítica. Pero siempre mejor con tres puntos.
Unión Deportiva Ibiza 1-2 Unión Deportiva Las Palmas
Ibiza: Daniel Fuzato, Joseda Menargues, Marcos Mauro (Iván Morante, m.78), Fausto Grillo, Gonzalo Escobar, Pape Diop (Martín Pascual, m.78), Kevin Appin (Ismael Ruiz, m.73), Christian Herrera, Mateusz Bogusz, Nolito (Javi Vázquez, m.50) y Ekain (Alex Aizpuru, m.73). Entrenador: Lucas Alcaraz.
UD Las Palmas: Álex Domínguez, Álex Suárez (Álvaro Lemos, m.45), Saúl Coco (Sergi Cardona, m.60), Eric Curbelo, Enrique Clemente, Fabio, Enzo Loiodice (Marc Cardona, m.45), Alberto Moleiro, Jonathan Viera, Pejiño (Sidnei, m.88) y Sandro Ramírez (Óscar Clemente, m.71). Entrenador: Xavi García Pimienta.
Goles: 1-0 Mateusz Bogusz, m.21; 1-1 Sandro Ramírez, m.55; 1-2 Jonathan Viera, m.62.
Árbitro: David Gálvez Rascón (Madrid). Expulsó por doble amonestación al local Gonzalo Escobar (m.36 y m.51). Amonestó a los locales Marcos Mauro (m.25), Kevin Appin (m.45) y Daniel Fuzato (m.46). Amonestó a los visitantes Enzo Loiodice (m.40), Saúl Coco (m.58) y Fabio (m.67)
Incidencias: Encuentro disputado en Can Misses ante 2.855 espectadores. Vigésima tercera jornada de LaLiga SmartBank 2022-2023
