El conjunto grancanario afronta este tramo final de nueve jornadas siendo uno de los tres únicos equipos que dependen de sí mismo para conseguir el ascenso directo.
Quedan nueve jornadas para la conclusión del campeonato regular en la categoría de plata del fútbol español. Las calculadoras ya empiezan a soltar humo y se empieza a mirar el calendario y los duelos directos que tienen los equipos de la zona alta de la clasificación que optan al ascenso directo.
La realidad, dinámicas negativas a parte, es que a falta de nueve jornadas solo hay tres equipos que aún dependen de sí mismo para conseguir el ascenso directo a Primera División y uno de ellos es la Unión Deportiva Las Palmas, que también tiene el calendario más difícil pero eso le permite depender únicamente de sus aciertos y no depender de los fallos de los demás.
A diferencia de la pasada temporada, cuando Las Palmas no dejaba de mirar al Real Oviedo y a la Ponferradina para intentar meterse en los puestos de promoción de ascenso, ahora mismo el conjunto de Xavi García Pimienta depende de sí mismo.
Esta próxima jornada, el conjunto grancanario es el único que tiene un enfrentamiento directo con un equipo de la zona alta de la clasificación, un Albacete que algo lejos del ascenso directo, no quiere desprenderse de la zona alta y así jugar la promoción de ascenso por segunda vez en su historia tras la promoción de 2019 donde cayó en semifinales contra el Mallorca.
