El delantero de la Unión Deportiva Las Palmas receta tranquilidad para conseguir el ascenso a Primera División y da la cara por su compañero y amigo Jonathan Viera.
Tranquilidad, esa es la receta que da Sandro Ramírez para conquistar el ascenso a la Primera División. Varias veces repitió esa palabra en la rueda de prensa de este jueves en la Ciudad Deportiva de Barranco Seco, donde dejó claro su amor por el representativo.
«Somos una plantilla bastante joven, pero hay algunos con muchos partidos en la élite entonces, nosotros intentamos transmitir tranquilidad porque es lo que tenemos que tener en este momento. El equipo que más tranquilo esté de los de arriba va a conseguir el objetivo. Tenemos que afrontar el partido con la máxima tranquilidad y siendo nosotros, agresivos en las dos áreas», explicó el ‘9’ este jueves.
Físicamente, asegura encontrarse bien: «Vine con un lastre de no hacer pretemporada porque ya saben como fue la situación. Eso me ha pasado factura esta temporada, no he tenido esa continuidad que un futbolista necesita para rendir y dar su mejor versión. Ahora mismo me siento bien, creo que estoy en un buen momento en un momento importante de la temporada y con ganas de seguir ayudando al equipo. Me siento bien y espero seguir dando este nivel hasta el final», comentó el ariete grancanario.
En ese sentido, quiso destacar el trabajo humano de la entidad amarilla: «Complicado cuando tienes una lesión, y más en mi caso particular que llevo algunos años seguidos teniendo problemas musculares, pero el club tiene detrás a un equipo grandísimo para intentar ayudar a recuperarse a los jugadores lo antes y lo mejor posible».
Además, desveló que ahora está intentando recudir su ímpetu en los entrenamientos: «Eso es algo de lo que hemos corregido y hemos tratado, soy un poco hiperactivo en ese sentido en los entrenamientos y hemos hablado de que no tengo que hacer tantas cargas, tantos esfuerzos físicos para poder llegar en las mejores condiciones al partido».
Con el objetivo del ascenso a Primera División, Sandro Ramírez tiene claro que cambiaría todo lo conseguido en su carrera por ascender: «Cambiaría absolutamente todo por ascender con Las Palmas. Este es el equipo de mi vida. Para mí, subir con el equipo de mi casa, de mi familia, el equipo que he defendido desde siempre y que llevo en el corazón, sería un sueño. Vine aquí para conseguir el objetivo y estamos cerca, pero todavía nos falta un poquito. Vamos a intentar hacer las cosas bien para conseguirlo», argumentó el ‘9’ amarillo.
Por último, mostró su respeto y admiración por Jonathan Viera: «Para mí Jonathan debería jugar siempre. Estando al 100% o estando al 50% porque creo que estando al 50% sigue siendo el mejor jugador de la categoría. Para nosotros tiene que estar siempre en el campo cuando esté bien físicamente, está claro, pero para nosotros es un jugador vital. Siempre es importante tenerlo».
