Siempre que el delantero catalán ha marcado, la Unión Deportiva Las Palmas nunca ha perdido. Al igual que la temporada pasada, sus goles vuelven a dar puntos al equipo grancanario.
En silencio y trabajando. Marc Cardona es el jugador que todo entrenador quiere tener. Cuando no juega, el ariete amarillo no pone una mala cara y cuando juega, con independencia de los minutos que lo haga, siempre intenta dar su 100%. A veces más y a veces menos acertado, Marc Cardona no negocia el esfuerzo.
Eso hizo que conectara rápido la pasada temporada con la afición amarilla y él respondió con goles. La pasada temporada hizo siete goles y hasta este lunes, su último gol también sirvió para culminar una remontada en los minutos finales contra el Mirandés y que valieron tres puntos. La celebración, como este lunes, le costó ser amonestado. Valió la pena.
Los números dicen que cada vez que Marc Cardona marca, la Unión Deportiva Las Palmas no pierde. A la postre, los goles del ’19’ amarillo siempre han sido importantes. Sin ir más lejos, dieron las victorias contra el Andorra, el Villarreal B y el citado Mirandés y dieron puntos que valieron un ascenso cuando empató en Mendizorroza y en el último minuto marcó el empate contra el Levante, un empate que terminó siendo clave para el ascenso a Primera División.
Esta temporada, Marc Cardona comenzó como titular contra el Mallorca pero a partir de ahí los minutos han disminuido drásticamente, jugando solo ocho minutos en Mestalla y un cuarto de hora en Girona antes que este lunes se reivindicara contra el Celta de Vigo tras ser objeto de penalti y marcar un gol que llevó al éxtasis al Gran Canaria.
