Rapapolvo presidencial tras la imagen en Vigo



Miguel Ángel Ramírez se persona en el entrenamiento de este domingo para aclarar que la temporada no está acabada y que actuaciones como la de este sábado en Vigo no pueden volver a ocurrir.

El 4-1 en el Abanca Balaídos no ha sido un partido más. El equipo amarillo lleva cinco jornadas consecutivas perdiendo, y a pesar que el objetivo de permanecer en Primera División parece prácticamente hecho, imágenes como las de ayer pueden provocar que el curso termine con un sabor amargo.

La UD Las Palmas de García Pimienta ha sido competitiva durante toda la temporada, incluso en la mayoría de derrotas. Como lunares negros se enmarcan las salidas al Bernabéu, Civitas Metropolitano y ayer, ante el Celta de Vigo. La trayectoria desde febrero ha ido en decrecimiento, la falta de incentivos por los que competir, unido a las necesidades del resto de equipos, han podido influir.


Para recordarles que la temporada no ha terminado y que la imagen debe ser lo más parecida a la primera vuelta posible, Miguel Ángel Ramírez asistió al entrenamiento de este domingo. El presidente, acompañado por Luis Helguera y Deivid Rodríguez, les pidió «compromiso, entrega y sacrificio» para este tramo final de la temporada, así como «respeto» a la afición amarilla.

El mensaje no sólo es a los futbolistas, también es para el cuerpo técnico, corresponsable de los éxitos de esta temporada, pero también de la racha de ocho partidos sin conocer la victoria de manera consecutiva, desde el 2-0 al Valencia el 10 de febrero de este año.