La UD Las Palmas ha hecho oficial la contratación del joven centrocampista portugués, que llega cedido hasta final de temporada por parte del Sporting de Portugal. Essugo, que también estuvo cedido la pasada campaña en el Desportivo Chaves, tratará de darle el físico y las piernas que le hacen falta al equipo en la sala de máquinas. Su llegada permitirá a Luis Carrión utilizar (o no) su formación preferida en el campo.
La dirección deportiva de la UD afrontaba el última día de mercado arrastrando un debe desde el comienzo del verano. Pese a la profunda renovación que se ha hecho en la plantilla respecto a la temporada pasada, todavía faltaba una pieza indispensable: el pivote defensivo. El elegido ha sido Dário Essugo, un prometedor mediocampista que llega a préstamo desde Portugal. Un movimiento necesario para los amarillos pero, al igual que ocurre con Fábio Silva, en el acuerdo con el Sporting de Portugal no se contempla ninguna opción de compra a final del período de cesión.
La necesidad de firmar a un pivote defensivo
Cuando analizamos qué es lo que pretendía implantar Luis Carrión en Las Palmas y qué le había funcionado años atrás (sobre todo en sus etapas en Cartagena y Oviedo), profundizamos sobre todo en la figura del doble pivote. Dentro del 4-2-3-1 que tanto le gusta al míster, esta figura de dos centrocampistas es su favorita para la sala de máquinas. Sin embargo, en estos primeros comienzos en la isla, no la había podido implantar con éxito. ¿Por qué? En resumidas cuentas porque le hacía falta un centrocampista de corte defensivo, que sujetara al resto del equipo y que tuviera las piernas suficientes para aguantar el ida y vuelta que propone en sus encuentros.
En los dos partidos en casa hasta la fecha, Carrión ha optado por incorporar a tres centrocampistas en lugar de su doble pivote habitual. Con balón este tridente (Enzo-Kirian-Javi contra el Sevilla, Campaña-Kirian-Javi contra el Real Madrid) ha dejado muy buenas sensaciones, pero sin él al equipo se le ven las costuras. Sobre todo en transiciones, dado que ninguno (salvo la excepción de Javi Muñoz) son jugadores aptos para ese ida y vuelta que va a ocurrir en durante toda el curso. Ya desde la pretemporada la sensación que transmitía el equipo era que necesitaba la figura del pivote y se estuvo trabajando en su incorporación. En Leganés se acudió al doble pivote y el equipo se rompió en la segunda mitad.
El elegido desde un primer momento fue Sergio Ruiz, que pese al descenso del Granada había demostrado ser uno de los pivotes más regulares de La Liga la pasada campaña. El equipo centró sus esfuerzos para ficharlo en propiedad pero las elevadas pretensiones del conjunto andaluz hicieron que el equipo descartara su incorporación. La escuadra nazarí tiene el suficiente músculo financiero para retener al futbolista en Segunda, así que hubo que pasar al plan B. El elegido entonces fue el congoleño (con pasaporte suizo) Charles Pickel, con el que el club llegó a un acuerdo y parecía que estaba atado. Sin embargo, desavenencias finales con el Cremonese hicieron que la operación se cayera a última hora.
Un jugador que apunta muy alto
A la tercera fue la vencida y Dário Essugo fue finalmente la opción que llegó. Sobre la bocina y con último requisito: que fuera menor de 23 años para poder inscribirlo con ficha del filial. Luis Helguera explicaba la decisión de fichar al portugués: «Es un jugador que nos faltaba, un perfil diferente. Los dos jugadores de la selección portuguesa sub 21 (Dário y Fábio Silva), han sido inscritos con el filial porque no teníamos fichas: nos ha condicionado mucho el no tener fichas. Creíamos que liberaríamos una pero no la hemos podido liberar finalmente y hemos tenido que inscribir a dos jugadores sub 23». La no salida de Álvaro Valles, con la que se contaba a principios de mercado, ha sido un verdadero quebradero de cabeza para el equipo.
Entrando en materia, lo cierto es que Dário Essugo apunta a ser un jugador relevante en el panorama europeo. Nacido en Lisboa pero de ascendencia angoleña, el jugador llegó a las categorías inferiores del Sporting de Portugal con solo nueve años. Ha ido quemando etapas muy prematuramente debido a sus grandes capacidades físicas, muy por encima del resto de jugadores de su edad. Como consecuencia, el futbolista ha estado jugando durante toda su etapa formativa contra rivales mucho mayores que él.
Su crecimiento ha sido muy alto en poco tiempo y en 2021, con solo 16 años y 6 días, se convirtió en el futbolista más joven en jugar un partido oficial con el Sporting de Portugal. Teniendo en cuenta que el cuadro lisboeta es una de las canteras más prolíficas del futbol europeo, del debut tan precoz de Dário ya avisaba de que se nos encontramos ante un jugador con un potencial enorme. Jacek Kulig, uno de los analistas mejor valorados de fútbol base a nivel mundial, ya avisaba de que el futbolista apunta muy alto: «tiene el potencial para ser un jugador clave en un club top», apuntaba en uno de sus primeros informes sobre el futbolista.
Quizás unos años atrás, cuando el contexto era otro, Dário Essugo ya estaría más que asentado en el primer equipo del Sporting y su nombre ya estaría en boca de muchos. Sin embargo, en el Sporting está pasando, salvado las distancias, una situación similar a la que ocurre con la UD actualmente. Históricamente, el equipo lisboeta ha apostado de manera decidida por su cantera y se ha consolidado como una cantera inagotable de grandes talentos no para el fútbol portugués, sino para equipos top a nivel mundial. Sin embargo, manteniendo esta filosofía, el equipo llevaba décadas a la sombra de Benfica y Porto, los dos grandes del país vecino.
Las dificultades para hacerse un hueco en el Sporting
La llegada de Rúben Amorim ha cambiado esta situación. Desde su llegada a los banquillos del José Alvalade, el Sporting ha pasado de ser el tercero en discordia a ser en estos momentos el equipo a batir. De no ganar un solo título de Liga en desde 2001 a ganar dos en los últimos cuatro años. El cuadro leonino es el vigente campeón y además jugará en Champions esta temporada ¿Y qué hacer cuando llegan los resultados deportivos? Como ocurre ahora en la isla, el Sporting puede permitirse incorporaciones que en otros años quizás fueran impensables. Y donde antes había paciencia y oportunidad para los jóvenes, ahora se demandan resultados y rendimiento inmediatos. Y en ese limbo se ha quedado Dário Essugo, indispensable en categorías inferiores de la Selección Portuguesa (lleva siendo titular desde la sub-15 hasta la sub-21) pero con poca participación en su club: solo 25 partidos con el Sporting desde que debutara hace ya tres años.
Como el Sporting no quería frenar la progresión de una de sus grandes promesas, decidió cederlo la temporada pasada en el mercado de invierno. La intención era que no saliera de Portugal, para poder foguearse contra los mismos rivales con los que se enfrentaría con la verdiblanca. El equipo elegido fue el Desportivo Chaves, equipo de la parte baja de la Liga que buscaba desesperadamente fichajes para eludir un descenso que parecía inevitable. Dário Essugo fue de lo poco rescatable en la segunda vuelta del equipo, que acabó la temporada como colista. Pese a los malos resultados colectivos, el préstamo fue positivo para el jugador, que fue una de las revelaciones en la segunda parte del campeonato.
Con las puertas del primer equipo nuevamente cerradas, Dário era consciente de que iba a salir nuevamente cedido de cara a la temporada 24/25. El club sabía que, tras su buen rendimiento en Chaves, había que buscar un contexto de mayor nivel para el jugador. Se decidió esperar hasta los últimos días de mercado y ahí fue donde apareció la UD: un equipo de una Liga top que buscaba un pivote al que inscribir con ficha del filial. Todo lo que necesitaba Las Palmas se concentraba en la figura de Essugo y el jugador encontró la oportunidad de seguir creciendo, ahora además en un contexto de mucho más nivel del que tuvo la temporada pasada.
Un fichaje que da vía libre al doble pivote
¿Qué perfil de jugador ha fichado la UD? Fundamentalmente un portento físico, que pese a su edad es capaz de aguantar los 90 minutos dentro de ese ida y vuelta en el que se han convertido los partidos de Las Palmas. Un ganador de duelos nato, sobre todo por arriba y una máquina de recuperar balones y sobre todo progresar cuando tiene la pelota. Si comparamos al jugador con el resto de futbolistas de su edad de las 7 grandes ligas europeas Dário Essugo es: líder en porcentaje en duelos aéreos, segundo en regates con éxito, duelos ofensivos ganados, acciones defensivas exitosas y tercero en entradas exitosas e intercepciones.
En el otro lado nos encontramos con una evidente falta experiencia en la élite (algo que entra en lo normal porque insistimos en que solo tiene 19 años), que era lo que buscaba la UD para afrontar una temporada que se presenta muy complicada con la mejor de las garantías. Al final, no deja de ser un futbolista que todavía está en formación y eso ante rivales contrastados y que conocen la categoría puede pasar factura. El club asume ese riesgo y es optimista en cuanto a su adaptación al modelo de juego de la UD y rendimiento inmediato.
La llegada de Dário Essugo no es que le de más alternativas a Luis Carrión, es que directamente se traduce en que va a poder implantar el 4-2-3-1 que tan buenos resultados le ha dado y que supuso que fichara por Las Palmas. Ya tiene la pieza que le faltaba en el doble pivote, lo que liberará jugadores como Kirian de tener que retroceder tantos metros para ayudar en labores defensivas. Jugar con este doble pivote también permitirá a Alberto Moleiro abandonar la banda de manera definitiva y jugar de mediapunta, posición donde más daño hace, o dará mayor libertad de movimientos a Javi Muñoz, que contra el Sevilla demostró que jugando más adelantado puede ser una pieza importante.
¿Será positivo o no la etapa de Dário en la UD? Dependerá en gran manera de su tiempo de adaptación al equipo. Es necesario puntualizar que tanto él como Fábio Silva no están entrenando con el equipo durante este parón de selecciones, sino que ambos se encuentran concentrados con Portugal para preparar un partido contra Croacia de la fase de clasificación para la Euro sub-21. Una vez hecho a la forma de Carrión de entender los partidos (que en principio encaja con su perfil), será el campo quien dicte sentencia. Siempre con prudencia y más aún cuando hablamos de jugadores tan jóvenes y que todavía han demostrado muy poco o nada. Pero lo cierto es que Essugo tiene un gran potencial y en club hay bastante optimismo con lo que pueda ofrecer en esta cesión.