El delantero luso sigue sin entrenarse con sus compañeros y lo hace en solitario con ejercicios de recuperación. El partido ante el Rayo Vallecano, sin prácticamente margen para la UD, abren un debate.
Arriesgar o no arriesgar. Fábio Silva, implicado en su recuperación para volver cuanto antes con sus compañeros, sigue entrenando en solitario tras la derrota de este sábado ante el Valencia, donde no pudo estar por la lesión muscular que sufrió en el encuentro ante el Atlético de Madrid.
Este domingo el equipo de Diego Martínez entrenó en Barranco Seco, pero en el grupo no estuvo Fábio. Junto al readaptador hizo ejercicios físicos, controlando los movimientos y tratando de ir recuperándose de su lesión muscular. El propio Silva subió una foto a Instagram de este hecho.
El dilema –si existe– es claro: ¿arriesgar este viernes con Fábio Silva con la posibilidad de perderlo toda la temporada, o jugártelo a una carta para seguir teniendo opciones para la permanencia? El pensamiento de Fábio es claro, y a pesar de ‘remar’ para llegar al partido ante el Valencia, su participación fue desaconsejada por los servicios médicos. Tras la derrota ante el Valencia, los de Martínez no tienen margen para el error.
La UD Las Palmas es completamente distinta con el delantero luso. No solo por el gol, también por la capacidad de asociarse, atraer rivales y presionar. Ante el Athletic y Valencia se notó su ausencia, la de uno de los únicos amarillos capaces de transformar el juego y dar sentido y continuidad a jugadas en ataque. Fábio, con cuatro sesiones más de entrenamiento por delante, batalla contrarreloj para estar en la finalísima ante el Rayo.