El pasado sábado la UD Las Palmas hizo oficial la contratación de Luis García Fernández como nuevo entrenador del conjunto amarillo. El asturiano llega con el objetivo de devolver al club a Primera División y firma por una temporada con opción a otra más si consigue el ascenso de categoría.
Luis García Fernández (Oviedo, 06/03/1981) será el entrenador de la UD Las Palmas para la temporada 2025/26. Esta será la segunda experiencia del técnico en el fútbol profesional español.
Comenzó su trayectoria en 2019 tras obtener la licencia UEFA Pro, firmando con el Juvenil División de Honor de la Damm, donde dirigió durante tres temporadas. Con el conjunto catalán logró un notable rendimiento, con 42 victorias en 84 partidos y una histórica clasificación para la Copa del Rey juvenil en 2022 (la 3º vez en 60 años del club).
Su buen hacer le permitió dar el salto al RSC Internacional FC en la temporada 2022/23. El equipo que competía en la Tercera Federación madrileña se convertía en aquel año en el segundo filial del Real Madrid. En abril de esa misma temporada y con el equipo madrileño en segunda posición, fue llamado por el RCD Espanyol para relevar a Diego Martínez e intentar evitar el descenso a Segunda División.
Sin embargo, en 11 jornadas solo logró dos victorias y no pudo salvar al equipo. A pesar de ello, el club confió en él para liderar el proyecto en Segunda, aunque fue destituido en noviembre de 2023 cuando el Espanyol marchaba 5º con 24 puntos en 14 jornadas.
Un mes después de su salida del Espanyol se incorporó al cuerpo técnico de la selección de Catar como asistente de ‘Tintín’ Márquez, con quien ganó la Copa Asiática en febrero de 2024. En diciembre fue ascendido a seleccionador, cargo que ocupó hasta mayo de 2025.
La filosofía de Luis García Plaza
“Le gusta jugar bien, proponer, ir a buscar al rival a campo contrario y mantener la posesión. A partir de aquí, tendrá diferentes formas de hacerlo, pero siempre con esa idea en la cabeza de ser protagonista” así analizaba Carles Domènech, director ejecutivo de la Damm a Luis García Fernández en el diario Sport tras su firma por el Espanyol.
Una filosofía que el propio entrenador explicaba en rueda de prensa unas jornadas antes de ser cesado por el club catalán: “Mis equipos no se van a meter atrás, trato de ir hacia delante, de atacar, de ser vertical cuando se puede. No me puedo traicionar a mí mismo y mi forma de entender el juego es ser valiente”.
Y es que, desde que aterrizó en el RCD Espanyol, el discurso de Luis García estuvo muy claro. Ya en su presentación dejaba muy claro los rasgos que quería ver en su equipo:
“Quiero que seamos un equipo que tenga personalidad, que no tenga miedo a tener el balón. Que seamos verticales, porque yo quiero tener el balón pero lo quiero para atacar no para especular. Si puedo atacar en 3 pases lo haré. Si tengo que dar 10 intentaré darlos. (…) Y a parte, que esta idea no nos debilite a nivel defensivo donde tenemos que ser un equipo muy incómodo. Que a los rivales no les guste jugar contra nosotros. Tener un compromiso grande. Estar fuertes en bloque defensivo, ya sea en bloque medio o bloque alto. Que a nivel de transiciones la gente esté comprometida y haga y repita esfuerzos de alta intensidad”.
Uno de los puntos fuertes de este entrenador es también la motivación y el saber cómo tratar a los futbolistas. Por su pasado reciente como jugador -estuvo activo hasta 2019- es conocedor de la importancia de este aspecto en sus futbolistas: “Te hace creer en su idea y que el equipo juegue como él quiere. Te convence con sus palabras. Lo vive con mucha pasión” explicaba en Sport Eric Vega, capitán cuando el ovetense dirigió a la Damm.
Vega también destacaba también que a Luis García le gustaba “tener charlas con tres o cuatro jugadores a la semana para saber cómo estaban y eso hacía que todos estuvieran metidos en la dinámica. Nos hablaba de una locomotora en la que si todos no echábamos leña se iba parando”.
Más allá de sus ideas, Luis García también es capaz de adaptarse a los puntos fuertes de sus equipos. En su llegada al Espanyol, se encontró con un centro del campo lleno de jugones con Darder, Denis Suárez o Melamed: “Tenemos grandísimos futbolistas de juego interior, debemos hacer daño con eso y ser agresivos por fuera” explicaba en su presentación como entrenador perico.
La Cantera
Otro aspecto que se tendrá en cuenta la próxima temporada será el uso de la cantera. Tras un año en el que se ha dejado algo de lado a los productos del anexo, las circunstancias tras el descenso obligarán a mirar de nuevo a la siempre fértil cantera amarilla.
“Hay que tener paciencia con los chicos, hay que elegir los momentos para acelerar esos procesos porque no es fácil llegar a la élite (…) En ese sentido soy una persona decidida, si el canterano tira la puerta abajo, no voy a tener ningún problema en que pueda participar conmigo” así respondía sobre el uso de la cantera también en su presentación en el Espanyol.
La llegada de Luis García Fernández es una apuesta valiente por parte de la UD Las Palmas. Un técnico con ideas claras, un carácter competitivo que arrastra de su reciente etapa como jugador y una apuesta de juego ambiciosa, aunque por consolidar en el fútbol profesional.
Su capacidad para conectar con el club y los jugadores, adaptarse a los recursos del equipo y dar protagonismo a la cantera serán claves en una temporada donde el único objetivo (aunque se intente esconder) es el ascenso. Si bien su experiencia en los banquillos de élite es limitada, el proyecto amarillo le ofrece una oportunidad única para demostrar que su discurso y filosofía pueden traducirse en resultados.
