Es el único trámite que resta para que Deivid sea anunciado como nuevo refuerzo de la UD Las Palmas. El central grancanario ya ha avanzado el acuerdo de rescisión con su actual club, el Valladolid, con el que ha ascendido a Primera División. El deseo del jugador y de su familia de regresar a la isla son mayores que las ganas de quedarse en Pucela en la máxima categoría.
Según avanza Canarias7 y ha podido confirmar udlaspalmas.net, la rescisión de Deivid con el Valladolid ya es un hecho. A falta de comunicación oficial por parte de la entidad blanquivioleta, el acuerdo de desvinculación contractual es total. Por lo tanto, comienza la cuenta atrás para que el central de Escaleritas vuelva al lugar que dejó en el verano de 2014 para fichar por el Córdoba.
Aquella salida, no exenta de polémica, tiene dividida a la afición de la UD Las Palmas. Su fichaje por el club que dejó sin ascenso a la UD en el último minuto no gustó a la hinchada. Por ello, Deivid lo tiene claro: «Si vuelvo, me tocará cambiar los pitos por aplausos», explicaba hace unos días en una entrevista en Canarias en Hora.
Se cambiarían, por tanto, las tornas para Deivid: de salir de una UD en Segunda para jugar en Primera, a renunciar a la máxima categoría para vestir la elástica amarilla. El central de 29 años ha disputado 104 partidos desde que emigró (80 con un Córdoba que llegó a capitanear y 24 con el Valladolid hasta que una lesión le impidió poder seguir defendiendo la portería pucelana).
En sus temporadas como amarillo, fue un fijo para Sergio Lobera: 81 partidos acumuló como futbolista de Las Palmas en dos años. Deivid llegará para comandar una defensa en la que tendrá que ganarse un puesto frente a Mantovani, David García y, si se quedan, Pedro Bigas y Ximo Navarro.