Y ellos, ¿dónde estaban?

Muchos de los que juegan esta eliminatoria aún no eran futbolistas en el último ascenso.


El último ascenso de la UD, hace más de una década, dejó una huella imborrable  en la historia reciente de la UD. Sin embargo, hace 14 años, la casi totalidad de futbolistas de la actual plantilla amarilla no habían llegado al fútbol profesional, aunque muchos ya apuntaban maneras en categorías inferiores.

Muchos de los que juegan esta eliminatoria aún no eran futbolistas en el último ascenso.
Muchos de los que juegan esta eliminatoria aún no eran futbolistas en el último ascenso.

Entre los que vivían ya del fútbol destaca uno por encima de todos: Juan Carlos Valerón. El de Arguineguín ya era todo un referente en el fútbol español. Con 24 años ‘El Flaco’ ya había debutado con la selección. Sin embargo, no sería una temporada para recordar. Ese curso descendió con el Atlético de Madrid a Segunda División. Un año donde Valerón vivió anclado en banda por Claudio Ranieri y Radomir Antic. Ese verano salió rumbo hasta Riazor para jugar en el Deportivo y empezar a forjar su leyenda en el fútbol español.

Para Carlos Aranda fue un año inolvidable en su estreno en el fútbol profesional. Hacía sólo un par de años que había llegado a la capital y esa temporada, como futbolista del Castilla, debutó en la Champions League con el Real Madrid de la mano de Vicente del Bosque. Una Champions que acabó por levantar el club blanco. El seleccionador cambió la vida del malagueño cuando lo reclutó del club de su barrio natal para convertirlo en futbolista profesional.


Apoño no había salido de su círculo natal. El futbolista malagueño ha tenido una carrera llena de obstáculos hasta llegar a la élite. En mayo del 2000, Apoño, con 16 años, jugaba en el equipo más representativo de su barrio de La Palmilla: el C.D. 26 de febrero. El vínculo que mantiene con el club de sus inicios sigue siendo especial. Es el ídolo de La Palmilla. En sus últimas semanas en el Málaga CF, cuando las cosas no le iban bien por La Rosaleda, el equipo juvenil de su barrio salió al campo con camisetas de ánimo para el mediocentro.

En Argentina, Mariano Barbosa estaba a punto de dar un gran paso en su carrera. El meta a se desempeñaba en el Barrio Sitra, su equipo del barrio. Le quedaba muy poco para dar el salto al CA Banfield el equipo que le catapultó al fútbol profesional.

A Xabi Castillo le perseguía una gran duda: seguir en el Athletic Club o dejar de jugar a la pelota vasca. El lateral zurdo competía en ambas disciplinas y el club vizcaíno le obligó a elegir entre un deporte u otro. El lateral eligió hacer las dos cosas. Al fútbol lo hizo lejos de Lezama, en la Sociedad Cultural Deportiva Durango.

En el filial Ángel López soñaba con llegar al primer equipo. El lateral de Pozo Izquierdo jugaba en Las Palmas Atlético en la temporada del ascenso en Tercera División. En el curso siguiente completó el salto al primer equipo junto a otros canteranos. Una quinta dorada liderada por Jorge Larena, Guayre, Pedro Vega, Rubén Castro, José Antonio o Miguel Ángel Nuñez.

Dentro de la disciplina amarilla asomaba por el juvenil un prometedor Momo. Una categoría más abajo, como cadete, Nauzet Alemán comenzaba a despuntar. Ese verano, partió rumbo a la UD desde Las Mesas. Fernando Vázquez en la temporada 2001/2002, la última en Primera, le convocó hasta en cinco ocasiones para jugar con el primer equipo.

Otros como Aythami Artiles o los hermanos Castellano, no habían recalado en la disciplina amarilla. Con 14 años, el central seguía jugando en el CD Arguineguín y se desempeñaba como mediapunta, lejos de su posición natural en la actualidad en el eje de la defensa. Los gemelos Javi y Dani lo hacían en el Puertos Las Palmas.