Más allá de la patética situación deportiva que estamos sufriendo, me preocupan las sensaciones, cada vez peores, con las que abandono el estadio cada 15 días.
A pesar de los nombres veo que el equipo es incapaz de jugar al fútbol, no pido jugar como el Barça porque es algo imposible para nosotros, pero sí saber sacar la pelota jugada de la defensa, y no siempre a la
"clementina":
Patapúm Pa´rriba !!!.
Me preocupa el ambiente en las gradas y la crispación que hay. Por un lado, no sé exactamente que pasó en la Naciente (creo que fue un problema con los megáfonos y los palos de las banderas), no me gustó que 2 niñatos se acercaran a joder la existencia a unos sevillistas que estaban disfrutando del partido con su equipo, ¡¡ solamente eso !!! porque ni insultaban a los jugadores de Las Palmas, ni a la afición amarilla (al contrario!!), en fin patético y triste, esto es lo que queda de la señorial y grandiosa afición de la UD. y lo peor es que esos 2 imbéciles forman parte del futuro de ella: que asco !!!
Y del resto de la afición, hasta los más acérrimos, están ya presos del desánimo y al borde de la depresión con todo lo que sucede alrededor del equipo. Yo en Agosto era bastante optimistas con las sensaciones, pero 2 meses después estoy bastante decepcionado.
En el plano deportivo, se demuestra una vez más que el tándem Juanito-Vidales no da más de sí. Y que ni en los peores momentos son capaces de encontrar la tecla exacta (sí es que la conocen) para revertir las situaciones. Los cambios que sin ser malos: gente con proyección ofensiva en un ppio, eran simples cambios de cromos y no de estrategia, táctica, etc... si quitas del Campo a jugadores de la calidad (a pesar de que pueda pasar por un mal momento) como Trashorras y N. Alemán te estás tirando piedras contra tu propio tejado.
Y el sábado que viene vamos a Cádiz que aún teniendo mejor plantilla que nosotros su situación también es bastante convulsa. A ver si al menos, aunque sea sin querer, somos capaces de pescar en río revuelto, y nos venimos con los 3 ptos.
