Fue una papa.
Pase estratosférico de Santa con la mano a Pablo, que cabalga cual potro desbocado por la banda derecha, sorteando las trabas del adversario para de repente mandar un globo perfecto a Saúl, que con un control brillantísimo pincha la bola, amaga, y anula a dos rivales dejándolos clavados, para en última instancia martillear la red con un remate seco e inexorable...
Hay maneras y maneras de contar un golazo...

El Turu era inmenso, para Saúl el mero hecho de que lo comparen con Flores es un honor.
Debe demostrar muchísimo todavía para ser un TURU, debe volver a driblar en medio metro, meter papas de cabeza, sentar a cuatro defensas... Tantos regalos a la vista que nos dio el Turu Flores... qué grande...
Esperemos que Saúl de amarillo pueda llegar a ser si no como el turu, por lo menos un gran ídolo amarillo. Para eso necesitará MINUTOS.