Otacon escribió:lito336 escribió:Mi padre me ha comentado que ahí siempre han habido piedras o de vez encuando se depositban allá en los años 60, la charca siempre se ha desbordado porque está en la desembocadura de un barranco y es más la charca necesita abrirse al mar para regenerarse. No se dejen llevar por el sensacionalismo...
Lo de que las dunas desaparecerán es verdad, pero son las dunas cercanas a la orilla que han disminuido de tamaño. Lo que hay que hacer es tomar medida para no seguir perdiendo arena y dejar que el ciclo de la arena se complete de manera natural. Pero siempre se han visto piedras por el faro...
Siempre! además, eso lleva ya semanas así, pero C7 hoy no tenía nada que poner en portado y puso eso. Y luego dicen que ellos no quieren perjudicar al turismo. Sensacionalistas de mierda!
En parte tienen razón ambos, pero hay que puntualizar. Que siempre ha habido piedras en la playa es cierto, según que época del año. Pero de ninguna manera en el número que hay a dia de hoy, por lo menos en los últimos 20 años, que son los que uno ha visto y de lo que puede hablar sin basarse en fotos. También llevan razón en que la tristeza, además de por el estado de la playa, es por las construcciones allí efectuadas. El proceso natural está bien jodido desde hace años, pero los procesos naturales no se ven de la noche al dia: la playa lleva 50 años en un proceso degenerativo y ahora se empiezan a ver las consecuencias del desastre de las construcciones que impiden el depósito natural de arena por los vientos. Además de ello, los bancales de los que se surtía la playa, los fondos arenosos han sido esquilmados debido a la extracción de áridos de diferentes puntos. Es un desastre ecológico de libro y ni sensacionalismo ni nada: es la cruda realidad, porque si bien es cierto que posiblemente en otras épocas los temporales y las corrientes se llevaban algo de arena, ésta vovlvía a ser depositada, como bien dicen. Pero había de donde nutrirse, ¿y ahora? Ese es el problema.
Mientras el jefe de costas sigue empecinado en culpar a las mareas y temporales, en un alarde de manipulación y desvergüenza, y ya puede decir misa con sus titulitos y sus presuntos conocimientos: a la vista están, la playa sin arena. Lo que no dice es que, si tuviera lo que hay que tener, igual que toda la clase política que lleva a Gran Canaria al infierno, lo ideal sería dinamitar primero ese centro comercial que además de ilegal es una auténtica basura, una mierda insoportable, patético, antiguo, impresentable en una sociedad de vanguardia. Y después, y con todas las de la ley, toditos los hoteles y demás construcciones, incluso los apartamentos que están junto a la charca y ese descabellado centro comercial de nombre imposible - Anexo II , miren ustedes qué horror de nombre - y devolver a su estado primigenio esta joya de la naturaleza asesinada por la ignorancia, el pasotismo, la cultura del pelotazo y la inacción de nuestra justicia bananera.
Pero tengan claro que eso no se hará ni de coña. A partir de ahora se aplicarán parches y remiendos, se mecanizará el depósito de arena como mal menor y la playa subsistirá a duras penas. Como todo en Gran Canaria y en Maspalomas: remiendos, manitas de pintura y mirar para otro lado. De momento vayámonos conformando con las migajas que vienen de Egipto o Túnez para que así salgan los cuatro idiotas de turno delante de las cámaras con el pecho hinchado y sonrisa profidén exponiendo cifras de crecimiento que les hacen muy felices. La felicidad de los imbéciles.