Así llega el Club Deportivo Tenerife al derbi canario

EL RIVAL | Vuelve la fiesta del fútbol canario. El duelo que todos los amantes del deporte en Canarias desean repetir en la máxima categoría del fútbol nacional. El partido que todo blanquiazul y amarillo, tinerfeño y grancanario señalan en los calendarios o el motivo principal para reencontrarse con su estadio. El derbi canario es un partido de sensaciones, de dinámicas, de psicología y aunque las matemáticas digan lo contrario, lo abstracto que es un derbi no es capaz de captarlo la ciencia.
Ayoze Pérez, una de las armas ofensivas del equipo blanquiazul
Ayoze Pérez, una de las armas ofensivas del equipo blanquiazul

La pasión, el nerviosismo, la ilusión, la alegría y la tristeza que produce un encuentro de esta índole es inigualable. Es la oportunidad de ostentar el título del «mejor equipo de Canarias», de saborear sanamente las mieles de ganar al eterno rival o por el contrario de hincar la rodilla y reconocer la superioridad de tu contrincante. Un derbi produce que partidos que tildan de descafeínado por jugarse entre semana, por ser televisados, por ser en horario nocturno o simplemente por las bajas que presenta un equipo no tengan nada que ver. Las peñas del CD Tenerife se han encargado de romper las primeras barreras que podían impedir la fiesta en las gradas. El mayor patrimonio de un club es su afición y merecen disfrutar con júbilo de esta fiesta del fútbol canario. Con tifos, con banderas al viento, papelitos y cartulinas la afición tinerfeña buscará ser el número 12 como en las grandes ocasiones. La amarilla, por su parte, ha demostrado la fidelidad a sus colores y no faltará a la cita, agotando las entradas incluso pernoctando a las puertas de su coliseo. Habrá buena entrada, habrá color, habrá pasión.

Cervera conoce la importancia de un derbi y reservó alguno de los titulares en el compromiso en el mítico Montilivi donde el Tenerife consiguió su último ascenso a Primera. Carlos Ruíz -que lo había jugado todo-, Moyano -que sólo se había perdido un partido por sanción- y tres canteranos (Ricardo, Cristo Martín y Suso) no entraron en la convocatoria. Decisión discutida por muchos pero el juego desplegado por el Tenerife, sobre todo en la primera mitad, le dieron la razón de que sólo la falta de acierto en la primera parte le privó de vencer. Su equipo llega en línea ascendente, con moral, con la confianza que dan 7 jornadas sin perder.  Por su parte Lobera no reservó a ningún jugador, quizás porque jugaba en casa y tenía un día más de descanso, sin un desplazamiento tan largo como el tinerfeño. Y le salió cruz. Dos lesionados -con el añadido de la conocida de David García- y la sanción del determinante Masoud, se suman a la baja del polémico Apoño. Bajas considerables que equilibran un duelo que hace unos meses tendría claro color amarillo, pero que ahora más que nunca compone la bandera canaria sin decantarse por ningún color.
Roberto es el talismán tinerfeñista. No conoce la derrota desde que suplió al capitán Sergio Aragoneses en una decisión de un entrenador que está demostrando llevar las riendas de su equipo. Seguro que Cervera tenía mejor estudiado a la UD Las Palmas de Lobera sin sus bajas, máxime cuando es un entrenador al que le gusta ganar sin excusas, con su rival en plenitud. Ahora tendrá más dudas, aunque donde no las tiene es en su equipo. La retaguardia parece clara con Roberto en portería; Moyano, Carlos Ruíz, Bruno y Raúl Cámara. El centro del campo ofrece más variantes, que suele usar el técnico tinerfeño según se desencadena el partido. Arriba el grancanario Aridane buscará reencontrarse con el gol en el Heliodoro mientras Ayoze seguir echándose al equipo a la espalda con una calidad que recuerda a grandes canteranos que salieron de vuestra isla: Jonathan Viera o Vitolo. La situación clasificatoria del Tenerife está afectada por un mal comienzo, aunque no es el puesto clasificatorio lo que más dependa en este tipo de partidos.
Será un partido de sensaciones reencontradas, de nervios, de pequeños detalles y de dinámicas. Que nadie dude que el resultado de este partido marca tendencias, a otros años me remito. Y más allá de los tres puntos, dinámicas y resultados lo importante es que ambas aficiones disfruten de la mayor fiesta del fútbol canario. Bienvenidos a los que vengan a la Isla.
por Fernando Palarea
eldorsal.com










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