CONTRACRÓNICA | Jonathan Viera Ramos volvió a demostrar sobre el césped del Municipal de Maspalomas porqué es el futbolista más importante de esta UD Las Palmas con una exhibición de fútbol, de ese fútbol tan suyo y tan particular que refleja una vez más que no ha nacido alguien que pueda sustituirle.
Suena una sinfonía perfectamente sincronizada, con sus altos y con sus bajos. La batuta la lleva un hombre de 27 años de edad y en plena madurez futbolística, un jugador de los que marcan un estilo y de los que hacen de lo imposible, de lo mágico, lo real. Jonathan Viera Ramos es un mago disfrazado de mediapunta que se dedica a hacer diabluras con un balón en los pies y el Tenerife, en la vuelta de la VI edición de la Copa Mahou, sufrió en sus propias carnes la esencia del ’21’.
El partido de la UD ante los tinerfeños fue cien por cien Jonathan Viera en estado puro. El de La Feria se dedicó a hacerle la vida imposible a los defensas a base de cambios de ritmo, de regates y de pases que dibujaba como si de un pintor renacentista se tratase. Y eso es Viera, un adelantado a su tiempo que impone un estilo artístico que emana directamente de lo que es y lo que ha sido Las Palmas durante las últimas temporadas.
Suyo fue el primer tanto tras lanzar una falta que acabó dentro gracias a una pillería. El canterano vio a Dani Hernández mal colocado y le hizo pagar muy caro ese error con un disparo desde 30 metros que besaría la red. Mientras tanto, el segundo gol amarillo se lo regalaría el propio Viera a Calleri con un pase picadito que destiló clase y que volvía a reflejar las señas de identidad de ‘Romario’.
Jonathan Viera es el hombre más importante de esta UD y lo demuestra cada vez que tiene ocasión. El jugador amarillo pidió sentirse valorado como creía que merecía y, sabiendo que igualar las ofertas que llegan desde la Premier suenan a utopía, lo cierto es que Las Palmas sabe que tiene un tesoro de futbolista que no debe dejar escapar porque es insustituible. Jonathan Viera solo hay uno.
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