
Ya hemos dado buena cuenta en varias ocasiones que Juan Manuel Rodríguez, siempre que puede, está en la grada del Anexo y de otros recintos deportivos para ver a la cantera y una nueva demostración es la llamada de Martín Kozhuharov, delantero del Juvenil División de Honor, para entrenar con el primer equipo.
Martín Mario Kozhuharov (25 de enero de 1993), tiene 19 años y volvió hace dos temporadas a la Unión Deportiva Las Palmas procedente de la cantera del Real Madrid, donde lo echaron tras un cambio de dirección en la cantera blanca. En su último año, en el Juvenil C, anotó 20 goles.
Desde su regreso a la entidad de Pío XII, ya había vestido anteriormente la camiseta amarilla y una temporada la del Vecindario, el ariete búlgaro ha militado en el Juvenil División de Honor de Mingo Oramas, donde en estas dos temporadas ha marcado 17 goles en los 42 partidos oficiales que ha disputado.

Sus buenos números tanto en la cantera del Real Madrid como en la de la Unión Deportiva Las Palmas hace que Martín Kozhuharov sea internacional en las categorías inferiores con Bulgaria. Su última participación, en la fase previa del Europeo Sub 19 que este verano se disputará en Estonia y al que aspira a estar José Artiles.
Delantero centro en el Juvenil División de Honor, el ariete búlgaro destaca por su movilidad y continuos desmarques, al mismo tiempo que sus cualidades hacen que también pueda jugar en la mediapunta. Además, no falla desde los once metros, desde donde ha marcado cinco de sus once goles en la presente temporada.
Tras estar la temporada pasada a la sombra de Adrián, ahora es titular indiscutible y segundo máximo goleador, por detrás de Dani Ojeda, del Juvenil División de Honor que tanto ha visto Juan Manuel Rodríguez, teniendo una opinión más que autorizada sobre el delantero búlgaro: «Es un chaval que es internacional, tiene una brega importante, se desenvuelve bien y va siempre a la carga en los centros al primer palo», manifestó.
El pasado martes jugó con el primer equipo frente al Casablanca, donde marcó el gol amarillo, y el pasado miércoles, debido a la ausencia de Quiroga, jugó el partidillo con los pupilos de Rodríguez y aunque no marcó se desenvolvió a la perfección. Este jueves ya entrenó por primera vez con el primer equipo y quien sabe si de aquí en breve puede debutar con Las Palmas y reemplazar a Iantchev, último búlgaro que jugó de amarillo, en la temporada 1991-1992.