«Estamos en una situación que tenemos que seguir, no tenemos que bajar los brazos y seguir hacia adelante». Es la receta del veterano Stephane Pignol, quien valoró esta mañana en Barranco Seco el devenir de la Unión Deportiva Las Palmas en las últimas jornadas de competición. Los amarillos enlazan ya diez fechas sin conocer la derrota —siete en competición regular, y tres en Copa del Rey— y el mensaje no es otro que seguir a por más.
Para Pignol lo importante es que la Unión Deportiva supo dar con la tecla cuando las cosas no funcionaron al principio: «Allí es donde supimos rectificar las pequeñas cosas, los matices del equipo. Y ahí es donde empezamos a ganar partidos. Se ve que el equipo tiene una fortaleza que es increíble, eso nunca lo había vivido», expresó el francés.
Alejado del once titular por la solidez defensiva que ha alcanzado el conjunto de Lobera con David García, Deivid, Murillo y Dani Castellano en la zaga, valora que «la competencia es buena», a la espera de las rotaciones. «Hay movimiento en el equipo y todos estamos al 120 %, y eso es lo que hace que esté donde está», en referencia al colectivo. De cualquier manera, estar en el banquillo nunca es agradable. «Al contrario, tienes más ganas de trabajar y enseñar que tu necesitas jugar», explicó, admitiendo que tanta competitividad «es bueno para todos los jugadores».
Sobre el techo del equipo se mantuvo con ambición. «Yo siempre soy ambicioso. Nuestro objetivo es meternos ya en los play-off, intentar entrar ahí y tener un colchón de puntos. A partir de ahí por qué no estar más arriba. Todos somos ambiciosos, viendo al equipo cuando lo ves así da para pensar: queremos ir lo más lejos posible», concluyó.
