En un verano en el que no paraban de sonar nombres de «galácticos» y en el que el proyecto de ascenso se confirmaba como realidad, al canterano Asdrúbal Padrón el club le daba la noticia de su vida; tendría ficha en el primer equipo. El club, la prensa, los compañeros e incluso él mismo, sabía que su papel no sería principal. Se tendría que conformar con minutos sueltos en los partidos, esos que tendemos a llamar de forma errónea como «los minutos de la basura».
Tendría que competirle el puesto a figuras consagradas como Nauzet o Momo y, además, llegaban nuevos jugadores como Delev o Masoud. Tarea casi imposible contar ni tan siquiera con los minutos de la basura para el joven canterano. Nadie, y me incluyo, hubiese apostado un céntimo a la titularidad del canterano a principio de temporada.
Pero Asdrúbal es un chico que ha luchado siempre y su camino no ha sido fácil. Una de las grandes perlas de la cantera. Mucho se ha hablado de sus cualidades, pero las lesiones truncaron su meteórica escalada a la profesionalidad. No contó para Jémez porque no estaba a tope, Juan Manuel tampoco miró a Asdrúbal, sus lesiones le generaban dudas, pero esta temporada, tras un gran año en el filial, ha conseguido ese tan deseado premio, el de ser parte del primer equipo.
Llegó, como ya dije, para engordar la plantilla. Para hacer buenos entrenamientos y, como dicen los entrenadores, sumar, pero lo cierto es que Asdrúbal es una realidad.
Poco tardó en quitarle el puesto a Momo, puede que por a la ineficacia del exjugador del Betis. Más tarde fue Delev, más con Bulgaria que en la isla, pero la gran sorpresa ha sido que le ganase la posición a Nauzet Alemán, hasta ahora intocable para Lobera. Nadie se lo ha regalado. Se lo ha ganado por confianza y ganas, pero sobre todo por la suma de esos «minutos de la basura» en los que aporta más que muchos en noventa. Por sus goles y por dejar todo en el campo. Esas son las cosas que valora el público amarillo, y por cosas como esas, Asdrúbal Padrón, a día de hoy, es titular con honores en la UD Las Palmas.
Es el nuevo ejemplo para los canteranos. Puede que no sea el que más fácil lo tenga, puede que no sea el mejor técnicamente, pero su espíritu de superación ha convencido a Lobera y ha conquistado a la grada.
[box size=»large»]por Jesús Izquierdo
@jesus_izdo
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