CONTRACRÓNICA | Se acabó la posibilidad de alcanzar el ascenso directo para la Unión Deportiva Las Palmas. La derrota en el Estadio de Gran Canaria ante el Recreativo de Huelva le da el ascenso matemático al Eibar y virtualmente al Deportivo de la Coruña. El equipo insular dejó escapar una ventaja de dos goles y regaló el ascenso en media hora.

Fiesta en el País Vasco y lágrimas en Gran Canarias. El Eibar es equipo de Primera División mientras que la Unión Deportiva aún no tiene asegurada su presencia en los playoffs de ascenso a falta de dos jornadas para el final del campeonato. El enésimo tropiezo del equipo de Sergio Lobera en un momento importante de la temporada iguala la pelea por los puestos de promoción y despeja la segunda plaza del horizonte.
Marcó Las Palmas en el primer minuto y el equipo desapareció. Un calco de lo ocurrido el pasado fin de semana en Valdebebas que preocupa y hace dudar de la fortaleza anímica de esta plantilla de cara a unas hipotéticas eliminatorias para el ascenso. Aranda adelantó al representativo pero a partir de ahí las líneas recularon y se sometieron al dominio de un Recreativo de Huelva que buscaba el empate enseñando sus colmillos. Se llegó al descanso con esa victoria parcial favorable a los de Lobera pero las sensaciones no eran alentadoras.
A pesar de ello, la UD fue capaz de ampliar la ventaja a través de una jugada ‘maradoniana’ de Momo que finalizó Aranda con maestría. El partido parecía cerrado. Con dos goles de ventaja y a falta de media hora para el final, pocos podían presagiar un desenlace como el que se produjo. La lluvia hizo acto de presencia como preludio del drama. Deivid coló el balón en su propia portería con mala fortuna y dio alas a los onubenses. La banda derecha que ocupaba Ángel era una autopista para Ezequiel Calvente y fue por ese sector por el que Menosse atacó de cabeza el lanzamiento de falta lateral que llegaba desde el otro lado del campo para igualar el partido.
Había vuelto a ocurrir. Y no se quedó sólo ahí. Ezequiel sentenció el partido ganando la espalda a la defensa – otra vez por el sector izquierdo del ataque recreativista – y anticipándose a todos para colar el balón a la red. Sonido de viento en las gradas y caras de incredulidad sobre el césped. Las Palmas dejó pasar el ascenso en una noche en la que podía haber recortado puntos a sus rivales de arriba al mismo tiempo que se alejaba de sus perseguidores. Pero como suele ser habitual en los últimos tiempos, el equipo volvió a fallar. Papel de regalo, lacito y el ascenso para Eibar.