OPINIÓN | Existe en el fútbol un componente psicológico, para algunos igual de importante que otros como el táctico o técnico, fundamental para entender este deporte. Paco Herrera ha deslizado en varias comparecencias su preocupación por la presión que supone ser la luz que alumbra. El desgaste del líder. Es un hecho que ni la Unión Deportiva pasa su mejor momento ni ha conseguido el objetivo, marcado por el propio cuerpo técnico, de ampliar ventaja una vez conseguido el maillot de líder.
Nada debe dilapidar el magnífico trabajo realizado hasta el momento. Lograr en veintiún jornadas de veintinueve transcurridas la posición de líder habla por sí solo de los méritos realizados. Betis, Valladolid, Sporting o Girona son candidatos, algunos de ellos con plantillas muy potentes, que también luchan por el mismo objetivo. Nadie había prometido que esto sería un camino de rosas. Que cunda el desánimo por una derrota clave, aunque no definitiva, sería un error de dimensiones mayúsculas. Este equipo ha demostrado saber reponerse de un mazazo histórico como el del pasado 22J. Nada debe variar la hoja de ruta.
En cambio, sí se debe analizar tendencias: esta Unión Deportiva desde que comenzó 2015 tiene ciertos comportamientos distintos al del origen de la temporada. La derrota ante un todopoderoso Real Betis es comprensible. Un choque entre dos candidatos a un sólo partido es, en muchas ocasiones, impredecible. El Betis fue más efectivo. Punto y final. A otra historia.
Lo que no debería volver a repetirse, por la dificultad del objetivo del ascenso directo y el escaso margen de error que habrá de aquí al final, es el comportamiento conservador en ciertos choques como en Santo Domingo o ante el Tenerife. No se han encontrado soluciones a un problema evidente: a esta Unión Deportiva le falta gol, Araujo es un islote y cada defensa poblada es una cita horrorosa.
Hace falta cambiar ciertos detalles para volver a la senda de las victorias y a la confianza en el sistema. Estoy convencido que pronto se volverá a hablar de esa Unión Deportiva que salía con solvencia de sus batallas. Pero hace falta arriesgarse. No es lo mismo perseguir que ser perseguido y el temor de perder el liderato ahora lo tienen otros. Con tranquilidad y acertando en los movimientos esta Unión Deportiva volverá a lo más alto.
Miguel Hernández |
Director de udlaspalmas.net
@mhernandez
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