Este incisivo competitivo ayudará a la UD Las Palmas a vaciar su enfermería y a que Pako Ayestarán empiece a introducir su filosofía. De esta manera, el técnico vasco podría presentar ante el Celta un equipo más parecido a lo que pretende.
Un parón para ponerse a tono. Un parón para completar la plantilla. La UD Las Palmas aprovechará muy bien este intervalo para colocar todas sus piezas. Pako Ayestarán tiene ante sí 12 días sin competición en los que podrá enseñar y mostrar sus ideas a los jugadores amarillos con el fin de conseguir que el próximo lunes 16 se pueda ver a un equipo bastante más reconocible para el ex entrenador del Valencia.
Ese es el objetivo de esta semana y Ayestarán lo sabía antes de ponerse al frente del conjunto grancanario para el encuentro del Camp Nou. A pesar de eso, la UD dejó detalles de lo que quiere el de Beasáin de sus futbolistas, aunque es evidente que el contexto del partido y el poco tiempo de trabajo son argumentos suficientes como para ponerle un límite a esas sensaciones que dejaron los grancanarios en el feudo blaugrana.
Esta semana es el momento de empezar a introducir los conceptos que quiere que sus pupilos desarrollen desde ya y, también, para empezar a recuperar a una serie de jugadores que están en el dique seco. Loïc Rèmy, Dani Castellano y Sergi Samper tienen durante estos días la oportunidad de acortar los tiempos para ponerse a las órdenes del nuevo preparador amarillo, una cuestión indispensable para que Pako Ayestarán trabaje con todos los efectivos que tiene en plantilla.
Asimismo, también está ultimando los detalles de su recuperación Alen Halilovic, pero el croata está ahora mismo en su país concentrado con la selección sub21 y su regreso a los terrenos de juego podría producirse vistiendo la elástica del cuadro balcánico.
Ayestarán tiene trabajo por delante. Estos días son muy importantes para acelerar la enseñanza de sus contenidos y dejar vacío el parte de lesionados.
