La UD vuelve a ser colista apenas 15 días después de abandonar el farolillo rojo tras empatar en Anoeta. En una jornada nefasta para los interese amarillos, vuelve a instalarse el pesimismo alrededor del equipo tras la imagen ofrecida en Mendizorroza y los resultados de los rivales directos.
Mucho más que una derrota más en el casillero. El primer equipo de la UD Las Palmas tocó fondo este fin de semana. La derrota y sobre todo la imagen dada en Mendizorroza ante un rival directo como el Alavés encendió todas las alarmas, en una situación que se ha agravado con los resultados del fin de semana.
Ahora mismo y con la jornada a medias, la UD Las Palmas es colista de la tabla con diez puntos en 15 jornadas. Sus dos acompañantes en el descenso, Málaga y Alavés, ganaron de forma convincente sus encuentros -el Málaga se impuso 0-2 en Anoeta-, y el equipo que marcaba la salvación, el Deportivo, hizo lo propio ayer ante el Leganés aunque por la mínima.
Lo cierto es que, tras 15 encuentros, la UD sólo ha sumado 10 puntos, ha tenido tres entrenadores a la espera de la llegada de Almirón como cuarto inquilino y ahora mismo sus cifras dicen que es el equipo más goleado del campeonato con 32 tantos recibidos, y además el menos goleador, siendo capaz de hacer sólo 11, junto con el Espanyol con un partido menos. Está a cinco puntos de una salvación que marca el Deportivo, tras la victoria del Athletic en el campo del Levante.
Las sensaciones del conjunto amarillo no parecen ser tampoco halagüeñas. Tras una victoria a priori balsámica ante el Betis, el encuentro de Mendizorroza devolvió a la realidad a un equipo al que le está faltando liderazgo y carácter tanto dentro como fuera del terreno de juego. Ahora mismo la tendencia tanto del Alavés como del Málaga es al alza por las sensaciones que transmiten.
El conjunto de Míchel ha sumado 10 puntos en el último mes y a punto estuvo de puntuar en el Bernabéu; el Alavés lleva dos de dos con Abelardo en el banquillo y, por delante, el Eibar se escapó hace semanas y el Deportivo sigue demostrando ser competitivo. El Athletic es el que peores sensaciones deja, pero con el nivel de su plantilla tarde o temprano se espera que abandonen la zona baja.
Quedan 69 puntos en juego y la salvación suele rondar los 40. En otras palabras, la UD necesita sumar casi la mitad de los puntos que quedan en juego para salvarse. 10 victorias en 23 partidos, o nueve y tres empates. La situación es reversible, pero el tiempo se va acabando y la reacción debe ser rápida y contundente, lo suficiente para mantenerse en el tiempo. Ésa será la tarea de Jorge Almirón o quien acabe tomando las riendas del banquillo, pero es, sobre todo, la tarea de unos jugadores que han rendido muy por debajo de sus posibilidades esta temporada.