El técnico granadino de nacimiento será el encargado de gestionar el equipo por tercera jornada consecutiva. De ese modo, Las Palmas tendrá que pagar una multa a la RFEF al sentar en el banquillo a un entrenador sin titulación.
La vida sigue en la UD. Y continúa sin entrenador. Pero el fútbol no para y el equipo necesita que alguien asuma esa responsabilidad. Paquito Ortiz vuelve a ser el elegido y, tal como informa Juan Luis Monzón, se sentará en el banquillo local del Gran Canaria el próximo domingo para afrontar como primer técnico el choque ante el Espanyol. De esta manera, sumará tres jornadas consecutivas dirigiendo al equipo amarillo.
Sin embargo, esta decisión obligará al club a rascarse el bolsillo. Que Paquito se siente en el banquillo acarreará una multa económica ya que no tiene la titulación pertinente. Esta normativa se recoge en el artículo 160 del Reglamento General de la RFEF donde se explica, claramente, que los clubes tienen un plazo de dos semanas para contratar un entrenador titulado antes de ser castigados con una sanción tras una destitución.
Dicho correctivo tendría un coste de 600 euros. No obstante, esta cifra crecería exponencialmente si se sigue incumpliendo dicha normativa hasta alcanzar un máximo de 30.000 euros. Además, el código disciplinario también expone que el propio Paquito podría ser sancionado con partidos de suspensión, aunque desde que recupere su anterior cargo ya podría cumplir sin problemas con el castigo que le podría caer.
Esta circunstancia se debe a la problemática que está teniendo Las Palmas para recibir el visto bueno definitivo de la contratación de Almirón por parte de la RFEF y de la UEFA. El ‘Caso Almirón‘ sigue enquistado y sin resolver, una cuestión que obliga a la entidad amarilla a seguir improvisando sobre la marcha porque LaLiga sigue su curso y el cuadro grancanario debe abstraerse de cualquier cosa que no sea ganar el fin de semana.
Aun así, pase lo que pase con Jorge Almirón esta semana será Paquito quien lleve al equipo en ese duelo ante el Espanyol que es una final en toda regla. La UD sigue buscando la manera de convertir al argentino en el nuevo entrenador amarillo, pero con el paso de los días este culebrón sigue atascado y es Paquito el que está teniendo que asumir un cargo que, verdaderamente, es un marrón en este momento.
