La salida de Viera podría abrir la posibilidad de ver un dibujo amarillo con un solo pivote y dos interiores que favorezcan la circulación de balón en tres cuartos de campo a pesar de que ese escenario no es sinónimo de éxito.
A esta UD Las Palmas le falta mordiente. Esta circunstancia se pudo observar de primera mano en Butarque. En el feudo del Leganés, el equipo amarillo no pudo aglomerar un bagaje ofensivo lo suficientemente bueno como para tener opciones de ganar y eso le puede hacer perder opciones a la larga de seguir en Primera. En ese sentido, la salida de Viera afectará en lo deportivo al equipo y puede que también al dibujo.
Sin el de La Feria la plantilla insular se ha visto trastocada con un mercado muy acotado en el que Paco Jémez no ha querido pescar. De ese modo, con Tana y Halilovic teniendo que dar un paso adelante, el primer experimento con el croata en una banda y el canterano por dentro no salió bien. Esa circunstancia podría metamorfosear a una UD que pasaría de jugar con dos pivote y un mediapunta a una con un pivote y dos interiores.
Con un sistema 4-1-4-1 ambos jugadores podrían salir beneficiados al encontrarse en una posición más centrada, una cuestión que les ayudaría a combinar entre ellos así como con los extremos y con un Calleri que en muchos partidos ha pasado desapercibido. Sin embargo, ese esquema requiere un pivote que asuma responsabilidades importante en labores defensivas para poder conseguir esa dosis de equilibrio necesaria.
Puede que esa misión no pueda ser cumplida ahora mismo por un Vicente Gómez que todavía no tiene todo el ritmo que necesita y al que siempre le ha faltado una pizca de entereza en tareas defensivas. A pesar de ello, el centrocampista de Schamann podría colocarse en ese puesto si contase con la ayuda de esos dos interiores, aunque parece evidente que el hombre ideal para ese papel es el lesionado Gaby Peñalba.
Sin el argentino suena un tanto complicado que Jémez apuesta por ese dibujo si no tiene del todo claro que con Vicente, quien no cuajó un mal partido en Leganés, pueda funcionar. Aun así, la convivencia de Tana y Halilovic en un once parece mucho más factible mientras ambos comparte sitio en el medio, aunque hombres como Etebo o Nacho Gil también podrían actuar en esa posición de interior.
No obstante, habría que catalogar hasta qué punto las bandas de la UD están necesitadas y hasta dónde pueden llegar hombres como el propio Nacho, Toledo, Momo o Jairo. Los extremos tampoco están rindiendo a gran nivel y esa es otro apunte importante para ver cómo se puede gestionar ese dibujo. Es cierto que Etebo y hasta Imoh Ezekiel podrían jugar ahí, pero todo depende de lo que pueda tener Jémez en su cabeza.
Lo cierto es que la marcha de Viera obligará a Las Palmas a encontrar un nuevo acomodo en el que sacarle el máximo partido posible a sus jugadores. Mientras que el fútbol son innegociables para Jémez, una solución para reencontrarle sitio a los jugones podría ser el cambio de dibujo. La UD depende de los hombres que tiene y de su comodidad sobre el césped dependerán muchas de las opciones de permanencia.
