La última cena de Viera se sirvió sin el postre de la victoria. La UD no logró superar al Rayo de Jémez en su casa pese a abrir el marcador a los 5 minutos de partido y a jugar en superioridad numérica durante casi toda la segunda mitad. El dominio amarillo se transformó en precipitación tras el descanso, y Araujo perdonó la más clara de la segunda parte.
Se lo habían preguntado a Mel antes del partido y no terminó de descartar esa posibilidad. Ante la lenta recuperación de Álvaro Lemos, el lateral diestro era una de las demarcaciones susceptibles a sufrir permutas, principalmente tras la titularidad de Curbelo en Castellón. Y el entrenador optó por Srnic, que funcionó en Elche y que hoy partiría en un once reconocible por el flanco diestro con Kirian ejerciendo de Galarreta.
Tras el saque de honor de David García, le tocó el turno a la UD de ir a por el triunfo. Y lo hizo con una declaración de intenciones desde el minuto 1. Pese a adueñarse del balón desde el primer momento, a los cinco minutos el encuentro comenzó a decantarse del lado de la balanza amarilla gracias a una jugada al contraataque. Pedri y Benito se encontraron para un centro que remató Viera de tacón y Narváez, muy atento en el segundo palo, tuvo que rematar hasta en dos ocasiones para batir a Dimitrievski.
Regresa la famosa celebración del teléfono, y es que el cafetero se está mostrando como un abrelatas profesional. La capacidad goleadora de Narváez y su espíritu de sacrificio se han metido en el bolsillo a una parroquia rendida a su nuevo delantero. Con el bético como referente, Las Palmas encerró por momentos al Rayo en su área, aunque los pases filtrados de Viera no siempre encontraran receptor.
Pero, cuando mejor plantados estaban los amarillos, llegó la jugada desgraciada de la primera mitad. Un Kirian que no estaba encontrando sus mejores sensaciones con el balón en los pies cometió una terrible torpeza al derriba de forma clara a Embarba dentro del área. Pena máxima evidente y el propio protagonista de la acción aprovechó para empatar con un disparo certero a la escuadra de Álvaro Valles.
Llegaron entonces unos minutos de zozobra para la UD. Hasta que Viera se hizo con la batuta. En la que puede haber sido su última función, el maestro tomó la manija en el ataque y, con la inestimable colaboración de su socio Pedri, activó a la grada con jugadas de fantasía a las que solo le faltaron la guinda del gol. Los futbolistas de Pepe Mel se marcharon a vestuarios sabiendo que era exiguo el premio para los méritos realizados en los primeros 45 minutos.
La UD perdona con uno más
Muy pronto comenzó a ponerse de cara el choque para la UD tras la reanudación. Tras cuatro minutos frenéticos – dos córners por bando y llegadas peligrosas -, Valles salió valiente a cortar un mano a mano fuera del área y, en el rechace, Trejo controló y superó al sevillano. Pero Ais Reig vio claramente cómo el argentino rebañó el balón con el brazo, anuló la acción y expulsó al mediapunta franjirrojo por doble amarilla. La reacción fue inmediata: Mel retiró a Kirian y dio entrada al chino Araujo.
Y no tardó el ’10’ en tener la mejor oportunidad del partido. Entre pérdida de tiempo y pérdida de tiempo visitante, Jonathan Viera sacó el periscopio desde su propio campo, dejó solo con un pase exquisito a Araujo delante del portero, resolvió el argentino como pedía la jugada de vaselina, pero su balón salió rozando el palo derecho de Dimitrievski. No se lo podía creer el delantero, que pudo haber besado el santo en su primer balón de la temporada frente a su público.
Narváez pidió el cambio por unas molestias musculares y entonces el partido se cayó por completo. Por culpa, sobre todo, de un Rayo Vallecano que se dedicó a frenar el encuentro con lesiones fingidas y parones que desquiciaron a la UD, que comenzaba a precipitarse en cada ataque. No generó una sola acción de claro peligro, que no encontró la fórmula para superar la última línea visitante.
Un empate que sabe a derrota y que frena una racha triunfal que hubiera supuesto poner el punto y final a un sensacional mes de diciembre. ¿El futuro? Todo incógnitas. Las dudas sobre Viera marcan absolutamente todo el devenir de la temporada de la UD Las Palmas, que hoy no consiguió brindarle el año nuevo a la grada con 3 puntos.
UD Las Palmas: Valles; Srnic, Aythami, Mantovani, De la Bella; Javi Castellano, Kirian (Araujo, 53′), Viera, Pedri, Benito y Narváez (Maikel Mesa, 64′).
Rayo Vallecano: Dimitrievski; Advíncula, Catena, Milic, Tito; Mario Suárez, Pozo (Óscar Valentín, 73′), Trejo; Andrés (Saveljilch, 56′), Embarba y Piovaccari (Saúl, 86′).
Goles: 1-0, Narváez (6′); 1-1, Embarba (21′, p.),
Árbitro: Saúl Ais Reig (Comité valenciano). Amonestó a Aythami Artiles (58′), De la Bella (59′), Mario Suárez (69′), Maikel Mesa (82′) y expulsó a a Trejo por doble amarilla (29′, 49′).
Incidencias: Partido correspondiente a la 21ª jornada de La Liga Smartbank que enfrentó a la UD Las Palmas y al Rayo Vallecano.