Una buena noticia para paliar los casos recientes de la enfermería. Además de Rubén Castro, Pepe Mel ya cuenta con otro de sus fijos en el once para afrontar lo que queda de competición con garantías. El gallego Álvaro Lemos, que estaba siendo uno de los mejores del equipo, se lesionó en el mes de octubre ante el Fuenlabrada y estaba en el dique seco. Hoy, ya se ejercita con el grupo al mismo nivel que sus compañeros.
Un puñal por el flanco derecho a quien ha echado de menos la UD Las Palmas en los dos últimos meses. Álvaro Lemos se rompió en el fatídico partido en casa ante el Fuenlabrada, a finales del mes de octubre, en el que los amarillos cayeron por 1-3 e iniciaron un bache que se prolongó durante unas semanas. Ese bajón coincidió con ausencias importantes como las de Pedri, Martín Mantovani o Álvaro Lemos, que lo habían jugado prácticamente todo con Mel.
Ahora, el entrenador podrá disponer muy pronto de su estilete en el lateral diestro, demarcación que ha estado ocupada por Eric Curbelo en la mayoría de jornadas, aunque también han tenido minutos Srnic y Jesús Fortes. El gallego disputó 12 encuentros de manera consecutiva y fue siempre uno de los futbolistas que más peligro generaron en el ataque amarillo.
Hoy, Lemos ha regresado a la dinámica de entrenamientos tras haberse resentido desde que se produjera el retorno inicial hace unas semanas. Con la premura de los encuentros de Badajoz y el que medirá a la UD ante el Zaragoza, se espera que el lateral pueda ser de la partida a partir del próximo fin de semana, fecha en la que el conjunto insular se medirá al Racing en tierras cántabras.