Sumidos en la mediocridad

Foto: LaLiga


La UD Las Palmas consumó su enésima derrota en otro partido en el que ni se asomó a la portería rival. El cambio de dibujo de Jémez sirvió para conjuntar un equipo más sólido a nivel defensivo, pero muy mediocre a nivel ofensivo.

El descenso ya puede ser una realidad matemática este domingo, aunque aparentemente ya se siente desde bastante antes en la UD. Paco Jémez aludió tras la derrota ante la Real Sociedad el pasado sábado a la «falta de recursos futbolísticos», y sin duda es una de las grandes razones que explican el regreso amarillo a la división de plata.

El técnico sorprendió con un cambio de dibujo en el que aparecían tres centrales, con Michel y Dani Castellano como carrileros. En punta, Nacho Gil, Calleri y Halilovic. Precisamente el futbolista cedido por el Valencia fue una de las imágenes para exponer esa falta de recursos de la que hablaba Jémez.


Probablemente el valenciano tendrá un futuro prometedor y mucho mejor rendimiento a medida que gane experiencia, pero a día de hoy es sólo un síntoma más de la mediocridad en la que se ha sumido la UD Las Palmas esta temporada. Esta noche, ante el Real Betis, Nacho Gil volvió a dejar esfuerzo, pero en Primera División no sólo vale el esfuerzo, que se supone debe estar implícito. Perdió prácticamente todos los balones que le llegaron y apenas tuvo acciones acertadas, algunas de ellas incluso sin siquiera estar presionado por defensores béticos.

Con eso, y viendo una UD ya de por sí muy pobre en ataque, se explica que los amarillos sumaran el segundo encuentro consecutivo sin probar los guantes del guardameta rival –Nacho Gil no fue titular ante la Real Sociedad-. Al final el gol bético es una anécdota más, puesto que daba igual una derrota que un empate.

La UD ha terminado tratando de eludir el descenso con muchos minutos en partidos decisivos con el delantero del filial o futbolistas a un nivel inaceptable como Jairo o Nacho Gil. El equipo amarillo se ha quedado sin argumentos y por ello disputará la próxima edición de LaLiga 123. Porque «la mejor plantilla de la historia» terminó siendo un equipo mediocre e incompetente en la máxima categoría.