El técnico vasco reiteró que está con ganas de seguir como entrenador de la UD Las Palmas y dejó claro que el club cree que con él en el banquillo el cuadro amarillo acabará saliendo de esta mala dinámica.
¿Se ve con fuerzas para seguir? «Tendría que estar muerto para rendirme. Ni yo ni los que estamos dentro nos damos por vencidos».
No piensa en la destitución. «Yo me centro en lo que me tengo que centrar. Esas son situaciones que escapan de mi control. Desde el presidente hasta la última persona del club estamos centrados en trabajar y estamos con confianza. Las Palmas estaba dominando. Da la sensación de que todo lo que puede salir mal sale mal y todo lo que puede salir bien también sale mal. El resultado es injusto, no creo que mereciéramos perder este partido. Estamos jodido, pero convencidos de que vamos a salir adelante».
Ve mejor al equipo a pesar de perder. «El equipo ha mejorado. El equipo ha jugado en muchos momentos bien. En el segundo tiempo el control del juego era de Las Palmas y las ocasiones eran de Las Palmas. Es innegable. El único error que cometemos en el partido acaba en gol del contrario. No es normal que ocurra, pero nos está ocurriendo».
¿Se plantea un paso al costado? «No, para nada. Mi salud está perfecta. Te vuelvo a decir que tendría que estar muerto para rendir».
No es normal dominar y acabar perdiendo. «¿Tú dirías que el control del juego no ha estado en nuestro equipo? Pues el resultado va en contra y no es normal. No es lo habitual que acabes perdiendo dos a cero».
El cambio de Calleri. «Pensábamos que necesitábamos combinar más por dentro. Viera con Vitolo combinan muy bien y queríamos entrar más por las bandas».
Mensaje a la afición. «Estamos tan dolidos como ellos. La afición es soberana y lleva mucho tiempo sufriendo. Me parece normal que manifiesten su frustración».
Falta confianza. «Lógicamente las victorias y las derrotas dan y quitan confianza. Las derrotas te dan menos confianza para filtrar balones, combinar, rematar… Lo que nos falta es resolver mejor nuestra acciones arriba».
¿Creen los jugadores en Pako Ayestarán? «Creo que sí. Si los jugadores no creyesen no hubiesen tenido la capacidad de sacrificio que han tenido hoy. Ellos han seguido las pautas que hemos ido trabajando esta semana y sólo en los últimos diez minutos se ha venido abajo por la ansiedad. El mejor reflejo de si un equipo cree o no es que hagan las cosas, y los jugadores lo han hecho».
¿Tiene algo de culpa el entrenador de la mala situación? «Por supuesto. Yo asumo mi parte de responsabilidad».
¿Sería una traición que lo cesasen? «No. Las decisiones no están en mi mano. Desde el presidente hasta el último empleado del club están confiados en salir adelante».
Explica de nuevo el cambio de Jonathan Calleri. «No será el primer partido que sin punta se gana un partido o se juega mejor. Muchas veces el atacar no es tener muchos puntos. Cuando acumulas muchos hombres arriba pierdes segundas jugadas y puedes caer más en fuera de juego».