Rubén Castro está hoy de celebración. El delantero grancanario cumple este 27 de junio 37 primaveras. Edad que, para muchos futbolistas, supone la retirada de este deporte. Pero Rubén sigue teniendo muchas novias. Pese a que su aterrizaje en la UD Las Palmas parece inminente, otros rivales de la categoría de plata no se rinden a la hora de intentar convencerle para unirse a sus proyectos.
José Luis Pérez Caminero lo tiene claro: quiere incorporar al ariete al Málaga CF, club en el que ahora trabaja como mandamás de la secretaría técnica. Según el Diario Sur, el conjunto boquerón busca reforzar una delantera que dejó mucho que desear la pasada campaña en Primera División. Tanto Castro como el getafense Jorge Molina interesan al Málaga.
Y es que no es de extrañar que Rubén despierte admiración en la Segunda División. Sus registros en esta categoría son de otro planeta: fue uno de los artífices de los dos últimos ascensos del Real Betis a Primera División, con 59 goles en sumando las dos temporadas. Unos registros al alcance de muy pocos.
Lo que parece un hecho es que Rubén y Setién no van a trabajar juntos en el Betis, por lo que el canario busca una rescisión para salir del club en el que se convirtió en uno de los mejores goleadores nacionales de la última década. El futuro del punta se esclarecerá en los próximos días, y falta por ver si finalmente el proyecto de Manolo Jiménez le seduce para formar una delantera letal junto a Sergio Araujo en la UD Las Palmas.
