El central grancanario comentó para el Diario AS sus sensaciones tras tomar la decisión de dejar la UD para recalar en el Córdoba tras el ‘Cordobazo’, dejando claro el valor que le da al comportamiento de su familia, algo primordial para él, en todo momento. Además, señaló que no se arrepiente de lo que hizo, aunque sí de las formas en las que actuó.
Una historia contada mil veces. La salida de Deivid Rodríguez rumbo a Córdoba en 2014 es algo que todavía persigue a un futbolista que mañana podría ser de nuevo titular ante el Deportivo. Aunque ya son muchas las veces en las que el central ha comentado cómo pasó todo y cómo se sintió, no deja de ser relevante que todavía tenga que hacerlo. Por ese motivo, en una entrevista concedida al Diario AS, el ’15’ hizo de nuevo retrospectiva para dejar claro cuáles fueron sus sensaciones tras dejar la isla después del ‘Cordobazo‘ por las críticas que recibió.
«Antes me dolía más. Al principio sufrí mucho cuando por los comentarios. Aunque más que por los comentarios, por los insultos. Cada día me caía alguna en redes, pero la realidad es que no sufría por mí porque me puse una coraza, sufría por mi familia y amigos», reseñó el zaguero para aclarar su situación.
En ese sentido, argumentó que para sus más allegados no fue fácil, sobre todo, al principio dado que sus «padres, mi familia, mis amigos, viven aquí. Ir al Estadio de Gran Canaria, o por la calle, y escuchar conversaciones donde a tu amigo o familiar lo están matando, me imagino que no debe ser muy cómodo».
Sin embargo, valora muy positivamente el comportamiento de toda su familia en esos momentos: «Les dije que estaba fuerte y tranquilo, y que no se metieran en nada. Y que por mucho que escucharan, no le respondieran a la gente ni en redes ni, por supuesto, en persona. En mi familia, en la que incluyo a los amigos de toda la vida, se han portado como señores. Nunca se han metido en nada y yo tampoco. Mi trabajo es hacerlo lo mejor posible en el campo. Ahí nadie me puede reprochar nada, siempre he sido un profesional con mis virtudes y defectos. Ahí es donde la gente me tiene que juzgar», declaró el ahora nuevo defensa amarillo.
A pesar de todo, no se arrepiente de haber tomado esa decisión, alegando que allí le trataron «espectacular» y que la gente le respeta «muchísimo» cuando pasa por Córdoba. Eso sí, recalca que las formas no fueron las más correctas: «Me arrepiento de la manera en que fue todo. Lo he explicado varias veces. Tras acabar el playoff todo empezaba y la pretemporada del Córdoba se iniciaba en dos semanas. Las Palmas tampoco me dijo nada, y tenía una oferta de Primera. Decidí irme allí y creía que era lo mejor. De las cosas que haces, si las haces con buena intención y pensando que es lo mejor, no creo que te debas arrepentir», manifestó.
Cerrar un circulo
A la hora de hablar de su regreso a la UD, Deivid explicó que todo lo que sucedió en 2014 puede quedar cerrado si logra el ascenso este año. El central es rotundo a la hora de decir que quedaría en paz en caso de conseguirlo, bromeando incluso con la retirada: «Si ascendemos ya me puedo retirar tranquilo del fútbol. Ascender, la temporada que viene juego cinco minutos en Primera y me vuelvo a mi casa. Eso sería cerrar un círculo perfecto. Para mí, ascender con Las Palmas sería un sueño y cerrar la etapa anterior del tema del Córdoba y quedarme en paz», finalizó.