Vicente Gómez llegó al Estadio de Gran Canaria para disputar uno de los partidos más emotivos de su carrera, en el que se enfrentaba al equipo del que siempre fue aficionado, más tarde jugador y en el día de ayer por primera vez rival.
El futbolista grancanario cuajó un gran partido ante los amarillos, haciendo gala de la técnica y calidad que le hizo brillar con la camiseta de la UD, pero en esta ocasión, Las Palmas no disfrutaba de su fútbol, lo sufría. Vicente se apoderó del centro del campo e hizo que las transiciones del Dépor fuesen más rápidas, dándole el ritmo necesario para que los gallegos pudiesen jugar por banda y sorprender a los canarios.
El ocho blanquiazul lo dió todo para defender la camiseta del Deportivo de la Coruña y fue de los jugadores más destacados de su equipo. Pero hubo un detalle que ha tocado el corazón de muchos aficionados amarillos. El futbolista como no podía ser de otra forma fue un profesional, lo que no impidió que sus sentimientos y el respeto que tiene por el club de su vida, salieran a relucir con el gol de los suyos en el 95′.
Vicente Gómez fue el único jugador que no fue con el resto del grupo a celebrar el gol, se quedó solo entre todos los jugadores locales, caminando hacia el centro del campo. Podrá jugar para cualquier equipo, pero nunca dejará de ser un amarillo más.
Increíble imagen en el gol del Deportivo. Piña del equipo, menos uno… ¡Respeto enorme! pic.twitter.com/sd8geCtyHw
— ActitUD (@KilianCabreraM) 4 de noviembre de 2018