El regreso de Paco Herrera es un hecho provocado por un bache donde el mal juego y los resultados han acabado con la etapa de Jiménez. En ese sentido, ganar en el Carranza debe suponer el primer empujón con el que reconquistar el terreno perdido en las últimas semanas.
Todo arranca de nuevo. La UD Las Palmas ha puesto el contador a cero con el aterrizaje de Paco Herrera y Cádiz es la primera piedra. Sin tiempo para testar piezas ni para probaturas, el técnico catalán debe de iniciar una reconquista lo más rápido posible con el claro objetivo de romper el bache que atraviesan los amarillos y colocar a una de las plantillas más talentosas de la categoría donde verdaderamente debería estar. Y eso pasa por, antes de nada, ganar en el Carranza.
No va a ser fácil. El Cádiz de Álvaro Cervera viene en plena dinámica ascendente al haber sumado 4 victorias consecutivas que les han acercado a los puestos de Playoff. Tras un inicio bastante dudoso, los gaditanos se han levantado y con el aliento de su siempre fiel público pondrán a prueba a una escuadra, la insular, que luchará contra la presión de recuperar los puntos perdidos en los últimos partidos.
Con ese escenario, Paco Herrera deberá buscar una reacción express de la que ya habló en su presentación. La UD tiene margen y la competición es larga, pero ya se han ido volando demasiadas oportunidades de acercarse a esos puestos de ascenso directo que empiezan a verse un tanto difuminados. Además, empieza a convertirse en crucial el recuperar el ímpetu competitivo de unos jugadores que quieren algo más que defenderse de los ataques rivales como dogma dominante en el estilo.
Sea como sea, Las Palmas inicia su nuevo camino y este sábado arranca todo de nuevo con menos tiempo para ello. No queda otra que remar lo más fuerte posible para dejar atrás esa racha en la que se han conseguido 8 puntos de 24 posibles.