El VAR le echa una mano al cuello a una UD dominadora (1-0)



Hasta que los árbitros no se pongan de acuerdo, va a ser imposible que la polémica en torno a las manos se acabe. Hoy, una mano de Álvaro Lemos mucho más dudosa que la vista el pasado jueves en área del Sporting decantó la balanza a favor del Girona en un encuentro en el que Las Palmas no mereció, ni mucho menos, perder.

Las únicas variantes planteadas por Pepe Mel respecto al choque del pasado jueves fueron las inclusiones de Jonathan Viera y Mantovani en el once en el lugar de Aythami Artiles y Drolé. El ’21’ amarillo y el ‘7’ rojiblanco, el uruguayo Stuani, protagonistas de un duelo antinatural para la Segunda División, acapararían todos los focos.

El Girona dio los dos primeros sustos de la mano del charrúa, pero los de Mel se sacudieron el miedo escénico en cinco minutos y, desde entonces, la primera parte fue de total dominio insular. Los laterales mantuvieron la profundidad que mostraron el jueves y, con el campo abierto, Las Palmas se encontró cómoda sobre Montilivi.


Jonathan Viera, escorado como siempre al flanco izquierdo, se encontraba con Pedri y entre ambos sacaban brillo a la chistera. El de La Feria estuvo a punto de regresar por la puerta grande pero, en el minuto 6, llegó demasiado apurado a un servicio perfecto de De la Bella. Su balón salió desviado pero la UD ya enseñaba los dientes.

Narváez, todo intenciones, se fajó en solitario entre los centrales y el colombiano salía ganador de casi todos los duelos… pero siempre se quedó a medias. Su último toque siempre fue malo y desaprovechó caramelos que Viera le envió por arriba. El mago repitió globo con destino a Srnic, que en sus primeros 45 minutos como amarillo enganchó dos derechazos que obligaron a Juan Carlos a estirarse.

Pese a los clásicos excesos de concentración de Mauricio Lemos en el centro de la zaga, Las Palmas no sufría en defensa y basaba su despliegue en la ofensiva. Con un cabezazo desviado de Narváez se llegó al descanso entre pitos del respetable catalán, que no entendían cómo un equipo de 29 millones de presupuesto era incapaz de manejar su partido como local.

Penalti, polémica y derrota injusta

Tras el intermedio saltó el Girona con otro espíritu. Con balones elevados que buscaban a la imponente figura de Stuani, los catalanes mostraron más intenciones de cara a la portería contraria. Especialmente tras el fugaz cambio de Jonathan Viera, que apenas duró cinco minutos en la segunda parte: Mel quiere dosificar al mago y Drolé entró con un perfil notablemente opuesto.

Srnic perdía fuelle por su banda y Pedri ganó en galones hasta que el fuelle se le agotó. Entre permutas de llegadas el colegiado gallego quise unirse a la fiesta para tomar una de esas decisiones que ni los especialistas en materia arbitral ven con clarividencia. Una internada por la banda izquierda del Girona terminó con el balón impactando de refilón con el brazo de Álvaro Lemos mientras el gallego lo intentaba retirar. Para el señor Muñiz Ruiz, penalti. El VAR no le llevó la contraria y Stuani aprovechó el regalo.

Mel recurrió a Juan Fernández y Pekhart para buscar el empate y las intentonas de la UD fueron, obviamente, menos elaboradas tras retirar a Pedri del terreno de juego. Un libre indirecto puso el susto en el cuerpo a los amarillos tras un planchazo de Mauricio Lemos. En el sprint final del encuentro, el propio zaguero uruguayo puso a prueba al guardamenta local con uno de sus lanzamientos de falta cargados de peligro.

El partido llegó a su momento más emocionante en el descuento. Dos paradas soberbias de Josep Martínez permitieron seguir soñando a la UD y, al contraataque, Drolé mostró que con una marcha menos también sabe desenvolverse: bicicleta, derechazo al segundo palo y mano prodigiosa de Juan Carlos. Hasta Josep se animó a subir a por el empate, pero el milagro no llegó. Mereció más Las Palmas, pero no le dejaron.

Girona: Juan Carlos, Maffeo (Mojica, 43′), Alcalá, Ramalho, Aday, Jozabed (Diamanka, 75′), Gumbau, Gallar, Granell (Samu Sáiz, 56′), Marc Gual y Stuani.

UD Las Palmas:  Josep Martínez; Álvaro Lemos, Mantovani, M. Lemos, De la Bella; Fabio, Galarreta, Viera (Drolé, 50′), Srnic (Juan Fernández), Pedri (Pekhart, 75′) y Narváez.

Goles: 1-0, Stuani (64′)

Árbitro: Alejandro Muñiz Ruiz (Comité gallego). Amonestó a Gumbau (68′), Gallar (90′), Mantovani (94′)

Incidencias: Partido correspondiente a la séptima jornada de La Liga Smartbank que enfrentó al Girona FC y a la UD Las Palmas.