La posible llegada de Raúl Fernández a la isla abre de nuevo un debate que deja a la UD Las Palmas ante un escenario en el que tendría tres guardametas con ficha profesional en su primera plantilla, una cuestión que es del agrado de un Raúl Lizoain que podría hacer las maletas para dejar el club tras 10 años.
Movimientos en la portería. La UD quiere cambiar su hoja de ruta en el mercado respecto a sus guardametas. Después de casi dos semanas de pretemporada, Manolo Jiménez ya ha dejado clara su intención de reforzar una posición tan específica como la de portero y todo apunta a que el cuadro amarillo tiene cerrada la contratación de Raúl Fernández tal como informan varios medios. De hecho, según apunta La Provincia, con el bilbaíno en la isla, los insulares tendrían en su primera plantilla hasta tres metas con ficha profesional.
Sin embargo, esta situación no es del agrado de un Raúl Lizoain que, aunque ha estado trabajando desde la profesionalidad y el silencio dese el inicio de la preparación, sabe que sus minutos podrían verse afectados. El entorno del arquero de El Carrizal señala con mucha rotundidad que no va continuar en la isla si se termina de concretar el fichaje de otro portero como Raúl Fernández. «Él quiere jugar y la UD deberá encontrar por su parte una solución», comentan los allegados al actual ‘1’ amarillo al mencionado rotativo.
A pesar de todo, el grancanario mantiene su espíritu de lucha por delante y desconoce qué intenciones tiene Las Palmas sobre su figura. Aun así, La Provincia publica que el nombre de Lizoain está en la agenda del Nástic de Tarragona. Más allá de eso, este embrollo tendrá que resolverlo el club y tendrá que buscar una manera para que sus tres porteros estén a gusto vestidos de amarillos, una cuestión que no parece que se vaya a resolver mientras continúen juntos dado que darles minutos a todos es misión imposible.
Tendrá que ser Manolo Jiménez quien les deje claro a sus guardametas qué rol van a ocupar dentro de sus esquemas para aclarar sus futuros. El técnico sevillano tiene ahora mismo la llave de la portería amarilla y tendrá que poner algo de cordura a una situación insostenible se mire por donde se mire. Está claro que la llegada de Raúl Fernández va a provocar un efecto mariposa que podría cambiar el futuro de los actuales arqueros.