La directiva amarilla sigue en buscando jugadores que mejoren la competitividad de su actual plantilla y pensaron en el versátil jugador de banda izquierda como una pieza interesante de mercado. Aun así, los andaluces no están dispuestos a dejar marchar al pacense a cualquier precio y piden una cantidad más elevada.
Como si de un tiburón que busca apresar a su presa se tratase, la UD Las Palmas afila ahora mismo sus dientes dentro de un mercado futbolístico que cada temporada resulta más complicado. La entidad insular quiere confeccionar un plantel de calidad que le dé a Manolo Jiménez todas las herramientas posibles para que durante este curso se pueda gestar un ascenso que colmaría los deseos de una isla que reclama fútbol de élite.
De ese modo, el club se ha puesto manos a la obra para pulir ciertos perfiles que hay en su actual nómina y una posición que preocupa es la de lateral izquierdo. Hace unos días varios medios informaban que Borja Herrera iba a volver a salir cedido, probablemente con dirección al Reus, y eso abría la puerta a un fichaje que acompañe a Dani Castellano, siendo uno de los elegidos por la directiva insular el versátil Javier Galán.
Sin embargo, tal como informa La Provincia, el Córdoba no quiere dejar salir al zurdo por una cantidad que se aleje del millón de euros y ha rechazado una propuesta de la UD de 550.000 euros así como una propuesta del Eibar de 600.000. El conjunto cordobés pretende hacer caja con la venta de algunos de sus mejores activos y sabe que Galán es una de las figuras que mayor valor, por lo que van a intentar sacar lo máximo posible.
Ahora Las Palmas tendrá que sentarse para ver si suben un poco su oferta por este extremo reconvertido a lateral de 23 años que puede jugar en ambas posiciones o busca otro jugador que pueda ser el recambio de Borja. Después de algunos veranos en los que no se pagaba por traspaso, la entidad insular está abriendo la mano para traer a varios futbolistas de esa manera como Álvaro Lemos o Fidel, aunque en el caso de Galán el precio que piden por ahora es demasiado elevado. Habrá que esperar acontecimientos.
