Objetivo: no bajarse de la ola



El filial afronta su próximo compromiso ante un Real Valladolid B (10:30, UDTV) que pondrá a prueba el nivel de excelencia de los hombres de Juan Manuel, que quiere seguir surfeando en la parte alta de la tabla clasificatoria y así alejar del todo el tiburón que el curso pasado les obligaron a nadar a contracorriente. 

Las Palmas Atlético navega en la cresta de la ola. El cuadro canterano ha empezado la temporada de una forma envidiable y eso les ha colocado en los puestos de privilegio de la clasificación. Por esa razón, mañana domingo visitan al filial del Valladolid con el objetivo de no caer al agua ni mucho menos, sino el de mantener el equilibrio para seguir con el mismo rumbo que les llevó a ser uno de los mejores equipos de la categoría en la segunda vuelta de la temporada pasada, justo cuando escaparon de aquel tiburón.

Ya lo dijo Juan Manuel Rodríguez cuando se consiguió la salvación: «Gracias a Dios, por fin el tiburón está muerto», pero ahora el peligro vuelve a estar ahí. Sin embargo, el inicio de temporada que han cuajado los amarillos demuestra que el ritmo de navegación no puede ir mejor, lo que deja claro que van con el carisma suficiente para afrontar todo lo que venga por delante, sea el equipo que sea el que esté delante.


En ese sentido, con un once más o menos definido y con la filosofía bastante aprendida, la UD aterriza en Pucela dispuesta a conseguir 3 puntos que asienten un poco más su lugar en la clasificación. Con el muro bien plantado y con la efectividad luciendo por sí sola, los insulares son ambiciosos con los pies en suelo, por lo que no van a cambiar el guion de sus partidos ya que este estilo está funcionando a la perfección en una competición en la que hay que tener mucho cuidado con las trincheras.

De esa manera, en un duelo de filiales como este, Las Palmas Atlético puede seguir sin caerse de la tabla. Los cachorros amarillos se aferran al equilibrio y no piensan resbalar.